“Estamos chocados por las heridas sufridas por nuestro colega Ameer al Halbi y condenados esta violencia no provocada”, dijo el domingo Phil Chetwynd, director de la información en la AFP.
La AFP pidió este domingo que se abra una investigación policial después de que el fotógrafo sirio Ameer al Halbi, que colabora con la agencia, resultara herido durante la manifestación celebrada el sábado en París contra una polémica ley y contra la violencia policial.
Ameer al Halbi, fotógrafo independiente que ha recibido varios premios por sus imágenes de Siria difundidas por la AFP, resultó gravemente herido en el rostro por un “porrazo”, según la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF), que denunció una violencia policial “inaceptable”.
Al Halbi, de 24 años, vive en Francia desde hace tres y cubría, como fotógrafo independiente, la manifestación en la plaza de la Bastilla.
“Estamos chocados por las heridas sufridas por nuestro colega Ameer al Halbi y condenados esta violencia no provocada”, dijo el domingo Phil Chetwynd, director de la información en la AFP.
Chetwynd subrayó que en el momento de los hechos, Al Halbi “ejercía su derecho legal a documentar, como fotógrafo, las protestas en las calles de París” y que se encontraba “con un grupo de compañeros que estaban claramente identificados como periodistas”.
“Pedimos a la policía que investigue este grave incidente y garantice que todos los periodistas están autorizados a realizar su trabajo sin miedo ni restricciones”, agregó.
Al mismo tiempo, la revista Polka Magazine, con la que el fotógrafo colabora también, expresó el domingo “su firme indignación ante la agresión policial que sufrió”.
“El porrazo que le provocó las heridas en el rostro tenía por blanco deliberado a un fotoperiodista que ejercía libremente su oficio”, dijo en un comunicado Alain Genestar, director de la publicación.
Al Halbi, que ganó varios premios internacionales, entre ellos el segundo premio de la categoría “Spot News” del World Press Photo en 2017, cubrió para la AFP la guerra en Alepo, su ciudad, en el norte de Siria.
Decenas de miles de personas salieron a las calles francesas el sábado en una jornada llamada “Marcha de las Libertades”, en la que se protestó contra un controvertido proyecto de ley sobre seguridad, considerado como una mordaza por sus detractores, y contra la violencia de la policía.