“El 45% de la población que vive en los centros son mujeres entre 60 y 70 años, mientras que la mayor cantidad de estos centros están ubicados en la provincia de Panamá, donde operan 41 casas hogares”.
Sobre la base de políticas públicas enfocadas a preservar la seguridad física, emocional y alimentaria de los adultos mayores, el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), anunció que en el 2020 se atendió a 1,300 personas de este grupo etario, bajo la protección de 74 casas hogares, ubicadas en diferentes puntos del país.
Una información emitida por el MIDES, contenida en el informe de gestión de la coordinación Nacional de Adulto Mayor, adscrita a este Ministerio, destacó que, “la protección a estas poblaciones se realizó a través de programas que permitieron que los administradores tuvieran los protocolos de prevención del COVID, acompañamiento diario sobre la situación de los hogares y todo el recurso necesario para el funcionamiento de sus centros”.
También reveló que “el año pasado, la Oficina Nacional de Administración de Subsidios Estatales, entregó a las casas hogares, patronatos y fundaciones sin fines de lucro, un total de 5.6 millones de dólares, para la ejecución de proyectos sociales en beneficio de la población vulnerable, que incluye a los adultos mayores”.
“Estas partidas -precisó- permitieron que este grupo tuviera a su alcance los servicios básicos para su convivencia”.
De igual manera, resaltó que “la ayuda ha beneficiado a albergues como el Centro Juan Pablo II, ubicado en Santa Ana, que abrió sus puertas el 13 de mayo de 2020, para brindar protección a los ciudadanos que vivían en la calle”.
Su administrador, Ariel López, explicó que, “gracias a la asistencia del MIDES, han podido albergar a más de 30 hombres y mujeres con diferentes patologías, que son atendidos por una trabajadora social de la institución”.
López detalló que “durante la pandemia han trasladado, con el apoyo del MIDES, a pacientes afectados por el COVID-19 a hoteles hospitales, donde se han recuperado satisfactoriamente”.
Para el administrador de este Centro, “estas ayudas representan un gesto humanitario, que ha permitido mejorar la calidad de vida de las personas que están bajo su cuidado”.
El informe del MIDES mostró, asimismo, que “el año pasado se realizaron alrededor de 140 supervisiones mensuales, las que garantizaron que estos centros brindan un servicio de calidad en lo relacionado con la atención, seguridad, alimentación y esparcimiento”.
El documento desveló que, “la aplicación de un protocolo de atención en tiempos de COVID-19, permitió fortalecer las medidas sanitarias y mitigó la propagación del virus, apoyado por un equipo de psicólogos, sociólogos, trabajadoras sociales y otros especialistas que estuvieron al servicio de estos hogares”.
“Con la aplicación de este documento -señaló el informe- se restringieron las visitas a los centros y se instaló un grupo de reacción rápida que atiende exclusivamente casos relacionados con la pandemia”.
De igual forma y por medio de “la Fundación Generación-Movimiento Amistad sin Límites, se entregaron tabletas a las casas hogares para promover la comunicación virtual entre los adultos y sus familiares”.
“Preocupado por la salud mental de los adultos mayores, el MIDES realizó acompañamiento a los diferentes centros, brindando más de 17 capacitaciones, a través de videoconferencias, con temas de soporte emocional”, agregó.
Conforme a su plan de trabajo, “en el 2020 MIDES aseguró la alimentación de los adultos mayores, al entregar alimentos secos a las diferentes casas hogares, como parte del programa Panamá Solidario, el que busca proteger a las poblaciones más vulnerables ante la pandemia del COVID-19. Garantizando el cumplimiento de los protocolos sanitarios que el MINSA ha impuesto, se abasteció a los centros con productos de limpieza para salvaguardar la vida de estos panameños”.
En este sentido, la ministra de Desarrollo Social, María Inés Castillo de Sanmartín, indicó “que los adultos mayores son un grupo prioritario dentro de la agenda del Gobierno nacional, al que se le brindará todo el apoyo y la atención social que requieran. Nuestro compromiso con la población longeva es brindarle protección, cuidado y que sus derechos sean respetados para que ellos puedan tener una vida rodeada de paz y tranquilidad”.
Otros datos sobre este tema, según el informe en mención, “el 45% de la población que vive en los centros son mujeres entre 60 y 70 años, mientras que la mayor cantidad de estos centros están ubicados en la provincia de Panamá, donde operan 41 casas hogares”.