Panamá destaca por su respuesta a la crisis de los marinos en medio de la pandemia.
Bajo la ponencia “Panamá como Hub Humanitario Marítimo de las Américas”, la secretara general de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), Elvia Bustavino, y la directora general de Puertos e Industrias Marítimas Auxiliares de esta entidad, Flor Pitty, participaron de un seminario web regional organizado por la Organización Marítima Internacional (OMI).
En este evento desarrollado de forma virtual, se expuso los desafíos a los que se enfrenta la gente de mar y se trajo a colación las mejores prácticas durante la pandemia de COVID-19 en la región de América Latina.
Durante su presentación, Bustavino hizo referencia a la implicación de la República de Panamá con el cambio de tripulación, y la importancia que supuso la no interrupción del comercio marítimo y el trabajo coordinado entre todas las entidades implicadas en el proceso de recepción de naves.
Además, resaltó cómo se afrontó el cambio de tripulación desde el inicio de la pandemia del coronavirus, destacando, entre otras acciones, el que Panamá fuera el único país que brindó apoyo humanitario al crucero Zaandam en los momentos más críticos de la COVID-19.
A la vez, remarcó la capacidad de respuesta y el compromiso con la gente de mar durante la pandemia, la cual quedó demostrada con los 12,329 cambios de tripulación realizados hasta diciembre de 2020, de los cuales 7780 se corresponden con desembarques y 4549 con embarques.
Según Bustavino, gran parte de estos resultados se debieron a la aplicación de un manual propio elaborado por la AMP, basado en los protocolos sobre cambios seguros de tripulación emitidos por la OMI, con el que se establecieron siete modalidades para repatriación, desembarco y embarque de tripulantes, el cual fue remitido a las líneas y agencias navieras, tripulantes, misiones diplomáticas y demás involucrados.
Por su parte, Flor Pitty hizo especial énfasis en el refuerzo de las medidas sanitarias adoptadas y, en especial, a las ventajas de la aplicación de la plataforma VUMPA —en la que se incluyen todos los documentos relacionados al convenio FAL 65—durante la Covid-19, al reducir las personas que deben abordar un buque y al conocer datos previos de la navegación de la nave, pudiendo saber si la operación podría ser o no de riesgo.
De acuerdo con la funcionaria, todas estas medidas, aplicadas por Panamá como hub humanitario, en pro de la gente de mar —fuesen o no de barcos de bandera panameña—, permitieron agilizar los procesos de inspección, contribuyendo a mantener la fluidez en el comercio marítimo y la operatividad de los puertos, al reducir los retrasos en maniobras de arribo, estancia y despacho de naves.
Este seminario desarrollado por la OMI, forma parte de una serie de seminarios realizados en diferentes regiones del mundo, llevados a cabo con el objetivo de debatir, buscar y desarrollar las mejores prácticas destinadas a aliviar los desafíos actuales a los que se enfrenta la gente de mar, especialmente durante la pandemia actual de COVID-19.