Datos citados por las organizaciones indican que desde 1960 la población mundial se ha duplicado y la agricultura ha dado respuesta, con un fuerte aumento de la producción alimentaria.
El Consejo de las Américas y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) destacaron ayer martes que el comercio internacional es una herramienta clave para mejorar la situación de los agricultores y las comunidades rurales.
En el marco de un encuentro de alto nivel, organizado por ambas entidades, expertos de los sectores público y privado participaron en un debate previo a la Cumbre de Sistemas Alimentarios 2021 convocada por las Naciones Unidas en septiembre.
En el evento llamado “Mesa redonda sobre agricultura y sistemas alimentarios: cómo el comercio internacional puede beneficiar a comunidades rurales y productores”, se trataron temas sobre cómo mejorar el bienestar, la productividad, la rentabilidad y la sustentabilidad de los agricultores.
“La actual coyuntura exige robustecer las políticas públicas y tomar decisiones basadas en la ciencia para estimular el comercio agropecuario y evitar trabas artificiales en intercambios que son fundamentales para la recuperación económica de los países”, afirmó el director general del IICA, Manuel Otero.
En la actividad también fueron discutidos aspectos como qué modificaciones en el comercio internacional serían beneficiosas para los agricultores y las comunidades rurales, las políticas públicas que deberían considerarse para fortalecer los sistemas agroalimentarios y cómo se puede trabajar en conjunto para un mejor aprovechamiento del comercio internacional por parte de los productores.
Según las autoridades, América Latina y el Caribe es la mayor región exportadora neta de alimentos del mundo, con casi el 14 % del comercio internacional. Es por eso que el sector agroalimentario está destinado a jugar un papel determinante en la recuperación económica y social de los países de la región después de la pandemia de la covid-19.
Datos citados por las organizaciones indican que desde 1960 la población mundial se ha duplicado y la agricultura ha dado respuesta, con un fuerte aumento de la producción alimentaria. Las proyecciones revelan que el planeta llegará a cerca de 10.000 millones de habitantes en 2050, por lo que es necesario seguir aumentando la productividad y hacerlo en armonía con la naturaleza.
Con ese escenario, el continente jugará un rol protagónico como gran productor agrícola y también de servicios ambientales, gracias a la calidad y diversidad de sus ecosistemas, destacó el IICA.
El IICA viene trabajando junto a sus 34 Estados Miembros en la definición de mensajes convergentes para la Cumbre de Sistemas Alimentarios 2021, que pongan en primer plano a la agricultura y a los productores y muestren al mundo las transformaciones que han venido realizándose.
En el encuentro global será discutido cómo lograr transformaciones que favorezcan la erradicación del hambre, la alimentación saludable y la conservación ambiental.