El economista de Caixin Wang Zhe, indicó que la recuperación económica “no es todavía sólida” y que “las presiones a la baja aún son relativamente altas”.
La expansión de la actividad manufacturera en China avanzó en julio a su menor ritmo desde mayo de 2020 al caer un punto respecto al mes anterior, según el índice gerente de compras (PMI) del sector que divulgó ayer el diario económico privado Caixin.
El indicador se situó en los 50,3 puntos por los 51,3 enteros de junio, los 52 de mayo o los 51,9 de abril.
En este índice, que elabora la compañía de información económica británica IHS Markit y que muchos inversores internacionales toman como referencia, un registro por encima del umbral de los 50 puntos supone un crecimiento de la actividad con respecto al mes anterior y por debajo, contracción.
La lectura de Caixin es la más baja desde el comienzo de la recuperación en el sector en mayo de 2020 y es también inferior a la prevista por los analistas, que pronosticaron 51 puntos para julio.
Asimismo, el PMI de la publicación es menor que el dato oficial, publicado el sábado por la Oficina Nacional de Estadística (ONE), que se situó en los 50,4 enteros en julio por los 50,9 de junio.
La publicación achacó la cifra a las inundaciones que sufrió el mes pasado el país asiático, entre otros factores, y acotó que el índice de nuevos pedidos registró su marca más baja en 15 meses.
El economista de Caixin Wang Zhe indicó que la recuperación económica “no es todavía sólida” y que “las presiones a la baja aún son relativamente altas”.