El Barça sin Lionel Messi, “es un salto hacia lo desconocido”: diez días después de la salida del legendario N.10 argentino, los aficionados azulgranas, todavía conmocionados, regresan este domingo al Camp Nou en busca de nuevos ídolos.
Messi se ha ido al París SG. Pero a las afueras del Camp Nou, todavía está en todas partes.
Sobre las bufandas y banderas que llenan los distintos puestos, que comenzaron a preparar todo cinco horas antes del inicio (18h00 GMT) de este primer encuentro oficial de la temporada contra la Real Sociedad.
En las camisetas de los turistas y curiosos, que caminan discretamente alrededor del estadio. En la valla del restaurante El Cargolet, a dos pasos de allí, calle Riera Blanca, que todavía muestra su foto y la palabra ‘Dios’, con el ya legendario N.10 a modo de i y de o.
Es cierto que la foto de Messi que adornaba la inmensa valla publicitaria a la entrada del Camp Nou ha sido retirada esta semana, dejando solos a Antoine Griezmann y Gerard Piqué. Pero la figura del pequeño argentino tardará en retirarse de la capital catalana.
“Fue un golpe emocional grande. Estaba en mi habitación cuando conocí la noticia. Empecé a enviar mensajes a todos mis amigos, y nadie lo creía. Ha sido difícil emocionalmente”, confiesa Adriá De Lucas (23 años), que para este gran día de regreso del público al Camp Nou (unas 25.000 personas esperadas el domingo por la noche), se ha puesto la camiseta de Leo Messi en el Barça.
– “¡Barça sí, Laporta no!”
Según él, el Barça post-Messi es “un salto hacia lo desconocido. Una sorpresa. Veremos qué sale”.
Pero el bienestar del club supera la pasión por un jugador. “Incluso sin Messi, si pudiera, ¡volvería al estadio hoy mismo!” exclama echando un vistazo a su hermano menor, que podrá asistir a este estreno de la temporada en el Camp Nou.
A pocas horas del inicio oficial de la temporada 2021-2022 en el Camp Nou, es un sentimiento extraño el que predomina en los alrededores del estadio. Un terremoto sacudió el club la semana pasada. Sin embargo, diez días después, la ciudad parece haber curado sus heridas.
Siempre hay muchos banderines, banderas y turistas que van a fotografiarse a la entrada del estadio más grande de Europa.
Las únicas huellas visibles de este choque son las pancartas colgadas por un pequeño grupo de aficionados en las vallas a las afueras del Camp Nou, con mensajes vehementes hacia el presidente del club Joan Laporta.
“Laporta, el Barça no es tu negocio”, “¡Barça sí, Laporta no!”, afirman, cuando otros califican al dirigente catalán de traidor.