Es la segunda estatuilla que atesora el mexicano, ya que en la sexta edición ganó el Platino a mejor interpretación masculina de teleserie por su participación en “Narcos: México”, aunque él no pudo acudir a recogerlo.
Diego Luna agradeció el premio Platino de Honor del Cine y el Audiovisual Iberoamericano con el discurso más inclusivo y más esperanzador de la noche: “Muchas gracias a todes”, ha dicho, antes de alentar a los asistentes: “somos capaces de mucho más y ahí viene una segunda oportunidad, todo va a ir bien”.
El actor, director y productor mexicano recibió su estatuilla de manos del presidente de EGEDA, Enrique Cerezo, que dijo de él que es “un todoterreno del audiovisual” y porque en él se aúnan los factores que definen a la industria audiovisual iberoamericana: talento, creatividad, profesionalidad, trabajo y solidaridad”.
“Estamos todos muy orgullosos de ti, y suponemos que tu mamá también”, bromeó Cerezo jugando con el título de una de sus películas más famosas, antes de entregarle la estilizada imagen de la diosa de los Platino.
“Ay, cabrones, qué chingona fiesta”, dijo un emocionado Luna al ser abrazado durante varios minutos por los aplausos del público que asiste esta noche a la gala de la octava edición de los Premios Platino.
Luna (Ciudad de México, 1979) ironizó con el premio -“sentí como que me querían retirar, espero que no sea el caso, esto empieza”, dijo, antes de asegurar que, para él, es “un compromiso a lo que me queda por hacer”.
El actor decidió leer su discurso, ahora que aún no necesita lentes, bromeó, aunque su discurso fue serio y comprometido.
“Hoy -dijo- podemos reunirnos en esta hermosa ciudad, retomar el espacio público, festejar nuestro quehacer, pararse en un escenario: parece un sueño, pero está pasando y lo voy a recordar por siempre, por siempre voy a atesorar este momento”.
“La pandemia nos trajo la certeza de una responsabilidad inminente, no podemos regresar a lo mismo, sería una pena regresar a donde estábamos y casi un suicidio colectivo. Nuestra relación con esta tierra que hemos destruido en nombre del progreso y el desarrollo. Nos toca vivir con más empatía y curiosidad por una responsabilidad que nos toca lo más íntimo”.
Una responsabilidad que, según el artista, debería llevarnos “a cambiar nuestro comportamiento en la arena pública y digo esto porque somos parte de una comunidad que debe poner ejemplo”.
“Tenemos que lograr que las distancias entre nuestras industrias se acorten, hemos de pensar en bloque, porque las narrativas dominantes globales terminan delimitando nuestros sueños y anhelos. Que no pase”, dijo Luna.
Y así, añadió, “todas, todos, todes contarnos nuestros cuentos. Nadie mejor que nosotres para hablar de nuestro contexto, adueñémonos de nuestra narrativa, y no emulemos lo que otras industrias y otros mercados han hecho. Inventemos la nuestra, confiemos en nuestro talento porque las audiencias y nosotres aquí lo merecemos”.
Yo agradezco profundamente ser parte de esta comunidad, vivo con mucho orgullo lo que hemos logrado, pero nos falta mucho (…) Somos capaces de mucho más y ahí viene una segunda oportunidad”, concluyó Luna, de nuevo ovacionado por el público asistente a la gala.
Es la segunda estatuilla que atesora el mexicano, ya que en la sexta edición ganó el Platino a mejor interpretación masculina de teleserie por su participación en “Narcos: México”, aunque él no pudo acudir a recogerlo a la gala presencial que tuvo lugar en la Riviera Maya del Caribe mexicano.
Luna, que ha participado en producciones tan destacadas como “Y tu mamá también”, “La terminal”, “Un día de lluvia en Nueva York” y otras como “Rogue One: A Star Wars Story” o “Narcos: México”, también ha trabajado como director y productor, apostando siempre por el nuevo talento iberoamericano, muchas veces junto a su amigo Gael García Bernal.