Durante más de un siglo el poder en Honduras lo han alternando los partidos Liberal, fundado en febrero de 1891, y el Nacional, en febrero de 1902, ambos conservadores, aunque líderes del primero lo definen como de centro, tirado más a la izquierda.
El 27 de enero Honduras no solo pondrá fin a un bipartidismo en el poder, sino que también retomará oficialmente el color original de su bandera nacional, con sus dos franjas en azul turquesa y una blanca en el centro, después de muchos años con un emblema en azul oscuro que pasará a la historia.
El fin del bipartidismo tradicional lo marcará la nueva presidenta que tendrá Honduras a partir del día 27, Xiomara Castro, líder del Partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda), fundado en 2011, luego del golpe de Estado al entonces presidente, Manuel Zelaya (su esposo) el 28 de junio de 2009, cuando promovía reformas constitucionales que la ley no le permitía.
Durante más de un siglo el poder en Honduras lo han alternando los partidos Liberal, fundado en febrero de 1891, y el Nacional, en febrero de 1902, ambos conservadores, aunque líderes del primero lo definen como de centro, tirado más a la izquierda.
Ambos partidos han gobernado entre luchas intestinas, una dictadura 1937-1949, al frente de Tiburcio Carías Andino, líder del Partido Nacional, y la interrupción del orden constitucional de los militares, principalmente en la segunda mitad del siglo pasado.
En la última etapa de regímenes militares, estuvieron en el poder desde el 4 de diciembre de 1972, cuando derrocaron al presidente Ramón Ernesto Cruz, del Partido Nacional, quien había asumido en 1971, hasta el 27 de enero de 1982, entregando el poder a los civiles, luego de la instalación de una Asamblea Nacional Constituyente, en abril de 1980.
Desde el retorno al orden constitucional en 1980, los hondureños han celebrado once elecciones generales, de las que cinco las ganó el Partido Liberal (1981, 1985, 1993, 1997 y 2005), cinco el Partido Nacional (1989, 2001, 2009, 2013 y 2017) y una Libre (2021).
LA NUEVA BANDERA
El Partido Liberal, bajo cuya bandera llegó al poder Manuel Zelaya el 27 de enero de 2006, se identifica con una de dos franjas en rojo y una blanca en el centro, mientras que la del Partido Nacional es en azul oscuro, con una estrella blanca en el centro.
Según apuntes históricos, fue en febrero de 1866, durante el Gobierno que presidió José María Medina, cuando se decretó la creación de la bandera nacional, con dos franjas azules y una blanca en el centro, con cinco estrellas, en azul, representando a los cinco países de la otrora Federación Centroamericana: Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua.
Entonces, no se estableció el tono del azul de la bandera hondureña, pero se sabe que en los primeros años del siglo XX se utilizó en diferentes eventos el emblema en azul marino y blanco.
El azul marino contradecía la letra del himno nacional, que data del 13 de noviembre de 1915, que en una de sus estrofas dice: “Tu bandera es un lampo de cielo por un bloque de nieve cruzado; y se ven en su fondo sagrado cinco estrellas de pálido azul…”.
Hay quienes afirman que el azul oscuro de la bandera hondureña fue usado porque ese ha sido el color de la bandera de la antigua Federación Centroamericana, sin faltar los que lo asocian con el emblema del Partido Nacional.
El 8 de enero de 1949, año en el que finalizó la dictadura de Tiburcio Carías, hubo una reforma sobre la bandera nacional y se estableció que las franjas horizontales superior e inferior serán de color azul turquesa, y la del centro seguiría siendo blanca con cinco estrellas de cinco ángulos salientes del mismo color azul, formando con cuatro de ellas un cuadrilongo paralelo a las franjas.
Pero los políticos y los militares le dieron poco cumplimiento al decreto con el nuevo color de la bandera, que volvió a ser utilizada en eventos castrenses y otros actos públicos con el azul oscuro.
Una semana después de haber sido electa, el 4 de diciembre de 2021 la presidenta Xiomara Castro anunció que a partir del 27 de enero la bandera nacional que se utilizará es la de las franjas en azul turquesa y blanco.
Muestra de la determinación de la presidenta Castro, es que el Estadio Nacional, de Tegucigalpa, donde será investida el día 27, ha sido pintado en azul turquesa y blanco.
Y en cumplimiento anticipado, los antiguos vendedores de banderas nacionales y de equipos de fútbol local y extranjeros, ya retiraron el viejo emblema con azul oscuro y ahora ofrecen la del azul turquesa, a un costo de 200 lempiras (unos ocho dólares).