En las protestas de julio de 2021 fue el lema más usado por los manifestantes.
Más de 10 millones de visualizaciones en YouTube, himno de la esperanza de un cambio en Cuba, nexo de unión entre cubanos y dos premios Latin Grammy: la canción “Patria y Vida” cumple un año de éxitos, pero el encarcelamiento de uno de sus intérpretes y la situación en la isla empañan el aniversario.
“Yo no celebro nada, yo me alegro de las cosas que están pasando gracias a los acontecimientos de ‘Patria y Vida’, pero, créeme, no estoy para celebrar. Estaré contento, me reiré y festejaré cuando esté con mis hermanos que han sufrido en carne propia todas estas duras circunstancias”, dice a Efe el rapero El Funky.
Eliécer Márquez Duany, El Funky, es uno de los dos artistas de “Patria y Vida” que vivía en Cuba -los otros cuatro residen en Miami- cuando la canción vio la luz en forma de video en YouTube el 16 de febrero de 2021.
El otro es Maykel Castillo, conocido como El Osorbo, quien está preso desde antes de las protestas populares del 11 de julio pasado, de las que “Patria y Vida” fue la “banda sonora”, como dice Yotuel Romero, otro de los artistas de esta canción implacable con el régimen comunista.
CÁRCEL PARA EL QUE ESTÁ EN CUBA Y PREMIOS PARA LOS OTROS
El Osorbo, pese a las numerosas peticiones para que sea liberado, sigue preso en la cárcel “Kilo 5 y medio” de Pinar del Río.
Es hasta ahora el único artista que ha ganado un premio tan importante como el Grammy latino estando privado de su libertad.
“Patria y Vida”, que cuenta también con las voces de Alexander Delgado y Randy Malcom Martínez, que forman el dúo Gente de Zona, y del cantante Descemer Bueno, fue elegida canción del año y ganó también ese premio en la categoría de género urbano en los Grammy Latino de 2021.
“El Funky”, que dejó Cuba en noviembre, asistió a la gala de los premios en Las Vegas junto a los otros integrantes de este proyecto que usó la música para expresar las ansías de cambio de los cubanos y su desacuerdo total con el Gobierno” de la isla, según sus palabras.
El rapero está dedicado a lanzar su carrera musical en EE.UU. pero no olvida a sus amigos en la cárcel, El Osorbo y el artista plástico Luis Manuel Otero Alcántara, y a “todos los demás presos políticos”.
Cambiando el lema “Patria o Muerte”, del Partido Comunista, el único legal en Cuba, por el de “Patria y Vida” y con un pegadizo estribillo que usa la terminología del juego del dominó, muy popular entre los cubanos, la canción le dice al régimen en el poder desde 1959 que ha llegado la hora de que se vaya.
“No más mentiras. El pueblo pide libertad, no más doctrina. Ya no gritemos patria o muerte sino Patria y Vida”, cantan estos artistas que usaron el escenario de los Latin Grammy para reclamar democracia en Cuba.
La canción fue cobrando popularidad rápidamente en Miami, donde las palabras patria y vida empezaron a verse pintadas en automóviles, paredes, camisetas y cualquier lugar visible, pero sobre todo en las redes sociales, desde las que se coló en Cuba y en otros países.
En las protestas de julio de 2021 fue el lema más usado por los manifestantes y muchos, menores incuidos, pagaron después con detenciones y juicios el haberlo gritado o cantado.
UNA CANCIÓN PODEROSA
“‘Patria y Vida’ es una de las pocas canciones del repertorio latino contemporáneo que no solamente se lanzó muy de frente a pedir un cambio, sino que lo hizo a pesar de que sus intérpretes tenían mucho que perder haciéndolo”, dice a Efe Leila Cobo, directora ejecutiva para contenido y programación latina en la revista Billboard.
A juicio de esta especialista en música latina, “precisamente esa honestidad y desespero son dos elementos fundamentales en su éxito”.
“Mas allá de su llamado, ‘Patria y Vida’ se convirtió en un himno para los cubanos que buscaban un cambio porque es una gran canción: tiene un gran coro, excelentes raps, gran lírica, y me encanta como combina lo melódico con el ‘estacato’ de las rimas”, afirma Cobo.
Pero, agrega, su “gran éxito, a mi manera de ver, es que logró que el mundo mirara la situación de Cuba con otros ojos y que se hablara con muchísima más urgencia de los derechos en Cuba”.
Cobo subraya que “es una canción poderosa y un testimonio poderoso de lo que puede lograr la música”.
Desde Nueva Jersey, el famoso saxofonista cubano Paquito D’Rivera dice a Efe: “A mí el tremendo éxito me tomó por sorpresa y aunque no cultivo ese tipo de música, me impactó la canción (…) Se puede hablar de un antes y después de ¡Patria y Vida!”.
Al hablar de la situación en Cuba tras las protestas, el músico señaló: “para decirlo con música, ‘El cuartico está igualito’ y hasta peor, pues ya ni se esconden para golpear públicamente a la población indefensa”.
“Para mí -dice- todo es cada día más confuso, nebuloso y en ocasiones me recuerda aquella famosa definición de ‘horizonte’, esa línea imaginaria que mientras más tratamos de alcanzar, más se aleja”.
“Orgulloso” de formar parte de un proyecto musical que le dio voz a los que en Cuba “no tienen acceso a nada” y mostró al mundo “el poder del arte y de la verdad”, El Funky no pierde la esperanza y llama a la unidad, que “es siempre lo que nos falta a los cubanos”.
En abril vencerá su permiso para permanecer en Estados Unidos, pero antes pedirá asilo político. Volver a Cuba hoy no es posible, pero espera poder hacerlo pronto. “Si no es hoy, será mañana”, apunta.