Putin dijo que la operación se enfocará en la “desmilitarización y desnazificación de Ucrania”, refiriéndose a la afirmación del Kremlin de que el ejército de Ucrania amenaza a Rusia y que está dirigido por neonazis.
MOSCÚ — El presidente ruso, Vladimir Putin, declaró el inicio de una “operación militar especial” en Ucrania, prometiendo que intentará desmilitarizar, pero no ocupar el país, dirigiéndose a su nación en un discurso televisado que fue transmitido justo antes de las 6:00 a. m., hora local.
Putin dijo que la operación se enfocará en la “desmilitarización y desnazificación de Ucrania”, refiriéndose a la afirmación del Kremlin de que el ejército de Ucrania amenaza a Rusia y que está dirigido por neonazis.
Dijo que estaba actuando después de recibir una petición de ayuda de los líderes de los territorios separatistas, respaldados por Rusia, que se formaron en el este de Ucrania en 2014.
“Tomé la decisión de ejecutar una operación militar especial”, dijo Putin. “Su objetivo será defender a las personas que durante ocho años han sufrido persecuciones y genocidio por parte del régimen de Kiev. Para eso, nos enfocaremos en la desmilitarización y desnazificación de Ucrania, así como en llevar ante los tribunales a quienes cometieron diversos crímenes sangrientos contra civiles, incluidos algunos ciudadanos de la Federación Rusa. Nuestros planes no incluyen la ocupación del territorio ucraniano”.
Putin pidió a los soldados ucranianos que depongan las armas de inmediato.
“Todos los miembros del servicio del ejército ucraniano que sigan estas instrucciones podrán abandonar la zona de batalla”, dijo. También ofreció lo que parecía ser una advertencia a otros países, como Estados Unidos, que han apoyado a Ucrania.
“Cualquiera que intente interferir con nosotros o, más aún, crear amenazas para nuestro país y nuestro pueblo, debe saber que la respuesta de Rusia será inmediata e implicará consecuencias que nunca antes se han visto en la historia”. dijo Putin. “Estamos preparados para cualquier giro de los acontecimientos”.
Putin presentó su operación tanto como un ataque contra los “nazis” en Ucrania, y como un rechazo al orden mundial liderado por Estados Unidos. La aspiración de Ucrania de unirse a la OTAN, dijo, representaba una grave amenaza para Rusia. Evocó el bombardeo de Yugoslavia por parte de la OTAN en 1999 y la invasión estadounidense de Irak en 2003 para dejar claro que consideraba que Occidente sufría una bancarrota moral.
“Durante 30 años, de forma deliberada y paciente, tratamos de llegar a un acuerdo con los países de la OTAN sobre una seguridad equitativa e indivisible en Europa”, dijo Putin.
Pero, según él, Rusia se encontró con “mentiras cínicas” y “chantajes” por parte de Occidente.
“¿Dónde está la justicia y la verdad?”, preguntó Putin. “Solo hay puras mentiras e hipocresía”.
Occidente, bajo el liderazgo de Estados Unidos, representa un “imperio de mentiras”, dijo.
En una declaración, el presidente estadounidense, Joe Biden, buscó responsabilizar directamente a Putin.
“El presidente Putin ha elegido una guerra premeditada que traerá una pérdida catastrófica de vidas y sufrimiento humano”, dijo Biden. “Solo Rusia es responsable de la muerte y destrucción que producirá este ataque, y Estados Unidos y sus aliados y socios responderán de manera unida y decisiva. El mundo hará que Rusia rinda cuentas”.
En su discurso, Putin se dirigió al pueblo ruso, argumentando que estaban en el lado correcto de la historia.
“Tú y yo sabemos que nuestra fuerza radica en la justicia y la verdad, que está de nuestro lado”, dijo Putin. “Y si esto es así, entonces es difícil no estar de acuerdo en que la fuerza y la disposición para luchar son la base de la independencia y la soberanía”.
Mientras hablaba, el Consejo de Seguridad de la ONU se reunió en Nueva York en un último intento de evitar la guerra. Varios embajadores entre los aliados de la OTAN, incluida la representante de EE. UU., Linda Thomas-Greenfield, pidieron a Rusia que desistiera y regresara a la mesa de negociaciones.
“Retroceda del abismo antes de que sea demasiado tarde”, dijo Thomas-Greenfield.
Michael D. Shear contribuyó con este reportaje.