La demanda de carga está por encima de los niveles anteriores a la Covid-19, aunque la capacidad aún es limitada.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) publicó datos de los mercados mundiales de carga aérea que mostraron un crecimiento más lento en enero de 2022.
De acuerdo con el organismo, las interrupciones en la cadena de suministro y las limitaciones de capacidad, así como el deterioro de las condiciones económicas del sector, frenaron la demanda.
“El crecimiento de la demanda del 2,7% en enero estuvo por debajo de las expectativas, luego del 9,3% registrado en diciembre. Esto probablemente refleja un cambio hacia la tasa de crecimiento más normal del 4,9% esperada para este año. Sin embargo, de cara al futuro, podemos esperar que los mercados de carga se vean afectados por el conflicto entre Rusia y Ucrania”, dijo Willie Walsh, director general de IATA.
Apuntó que los cambios relacionados con las sanciones en la actividad manufacturera y económica, el aumento de los precios del petróleo y la incertidumbre geopolítica están convergiendo. “Se espera que la capacidad se vea sometida a una mayor presión y es probable que las tarifas aumenten. Sin embargo, todavía es demasiado pronto para predecir en qué medida”, señaló.
De acuerdo con las estadísticas de la IATA, la demanda global, medida en toneladas-kilómetro de carga (CTK*), aumentó un 2,7 % en comparación con enero de 2021 (3,2 % para operaciones internacionales). Esto fue significativamente inferior al crecimiento de 9,3% observado en diciembre de 2021 (1% para operaciones internacionales).
Mientras que la capacidad fue un 11,4% superior a enero de 2021 (10,8% para operaciones internacionales). Si bien esto está en territorio positivo, en comparación con los niveles anteriores a COVID-19, la capacidad sigue siendo limitada, un 8,9 % por debajo de los niveles de enero de 2019.
En lo que respecta a Latinoamérica, los transportistas reportaron un aumento del 11,9% en los volúmenes de carga en enero de 2022 en comparación con el período 2021.
Esto fue una disminución con respecto al desempeño del mes anterior (19,4%). La capacidad en enero bajó un 12,9 % en comparación con el mismo mes de 2021 y se mantiene muy por debajo de los niveles anteriores a la COVID-19, un 28,9 % menos que en 2019.