El 14 % de las muertes están relacionadas con cáncer, el 7 % con diabetes, y el 4 % con enfermedades respiratorias crónicas.
Las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la diabetes y las enfermedades respiratorias son las principales causas de muerte en Panamá, informaron este viernes las autoridades sanitarias.
El 26 % de los fallecimientos en el país centroamericano, de 4,28 millones de habitantes, se deben a infartos, hipertensión arterial y derrames cerebrales, es decir, enfermedades cardiovasculares, indicó el Ministerio de Salud (MINSA).
El 14 % de las muertes están relacionadas con cáncer, el 7 % con diabetes, y el 4 % con enfermedades respiratorias crónicas, agregó la autoridad sanitaria.
En total, el 51 % del total de muertes están vinculadas a esas enfermedades no transmisibles (ENT), que son responsables además del 37 % de los decesos de personas de 70 años o más en Panamá, de acuerdo con los datos oficiales.
El MINSA añadió que “se han identificado importantes factores de riegos que inciden en el aumento de las ENT, como lo son el sexo, la edad, la genética, así como los factores sociales y ambientales como la exposición a contaminación el aire, dietas pocos saludables y estilo de vida sedentario”.
Destacó empero que todos esos factores de riesgo “pueden prevenirse mediante la eliminación del consumo de tabaco, de alcohol, manteniendo una alimentación saludable y teniendo actividad física”.
“El Ministerio de Salud le pide a la población seguir las recomendaciones expuestas para así contar con una buena salud y por ende mejorar la calidad de vida”, dijo la entidad sanitaria en un comunicado.
En el marco del Día Nacional de Combate a la Obesidad, que se celebra el 4 de abril, se citaron datos oficiales de 2019 según los cuales el 71,7 % de los panameños mayores de 18 años sufre de exceso de peso: un 35,3 % padece de obesidad y un 36,4 % de sobrepeso.
La Fundación Panamá Saludable agregó que alrededor de 9.000 personas fallecen cada año por obesidad o alguna enfermedad relacionada al sobrepeso, lo que representa el 45 % del total de muertes en Panamá.