Durante esta Semana Santa, los peregrinos no solamente llegaron a la iglesia de Santiago Apóstol desde los diferentes puntos del distrito de Alanje, sino del resto de la provincia de Chiriquí y otros sitios del país, incluso del exterior.
La devoción por el Santo Cristo de Alanje se hizo presente este año, nuevamente, en el poblado colonial alanjeño fundado en 1591. Después de dos años de pandemia, los oficios religiosos católicos de la Semana Santa se reanudaron y, por supuesto, la feligresía acudió a la iglesia de Santiago Apóstol.
Los peregrinos no solamente llegaron desde los diferentes puntos del distrito de Alanje, sino del resto de la provincia de Chiriquí y de otros sitios del país, incluso del exterior.
Se trata de una tradición religiosa muy reconocida, que ha trascendido a las diferentes generaciones, especialmente porque la fe hacia el Santo Cristo de Alanje ha sido y continúa siéndolo de gran apoyo espiritual en los momentos de tribulación y de alegría.
