En el cuarto mes del año, además, la creación de empleo fue robusta con 428.000 puestos de trabajo más, y los sectores donde más aumentó la ocupación fueron el ocio y la hostelería, la industria, y el transporte y logística.
Wall Street abrió en rojo este viernes y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, perdía al inicio de la sesión un 0,70 % tras el desplome que vivió la bolsa ayer que afectó especialmente al Nasdaq, donde cotizan las principales tecnológicas, que bajó casi un 5 %.
Diez minutos después de la apertura del parqué, el Dow Jones de Industriales bajaba 231 puntos o un 0,70 %, hasta los 32.679 enteros.
El S&P cedía un 0,62 % o 25,75 puntos, hasta los 4.117,50 enteros y el Nasdaq perdía un 0,70 % o 89,75 puntos, hasta los 12.768,25 enteros.
Antes de que sonara la campana, la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, en inglés) anunció que la tasa de desempleo en Estados Unidos se mantuvo en el 3,6 % en abril -la misma cifra registrada en marzo y la más baja desde el inicio de la pandemia-, un mes en el que hubo 5,9 millones de desempleados.
En el cuarto mes del año, además, la creación de empleo fue robusta con 428.000 puestos de trabajo más, y los sectores donde más aumentó la ocupación fueron el ocio y la hostelería, la industria, y el transporte y logística.
Las cifras de abril confirman el buen momento que vive el mercado laboral estadounidense, con un desempleo muy bajo y muchas oportunidades para quienes buscan empleo, lo que a su vez ha derivado en que un elevado número de trabajadores estén abandonando sus puestos de trabajo para acceder a otros con mayor salario y mejores condiciones.
El miércoles, la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos anunció una subida de los tipos de interés de medio punto con el objetivo de luchar contra una inflación desbocada, la mayor subida de tipos en más de dos décadas, ya que la última vez que el banco central estadounidense anunció un incremento de medio punto fue en el año 2000.
El principal objetivo del banco central estadounidense en estos momentos es mitigar la elevada tasa de inflación, que en marzo pasado se situó en el 8,5 %, la más alta registrada desde 1981.
Esa subida de tipos fue bien acogida por la bolsa en un primer momento, al cierre del miércoles, pero todos los indicadores reaccionaron a la baja en la jornada del jueves.
Por sectores, todos amanecía con pérdidas -menos el energético (0,75 %) y el de servicios públicos (0,2 %)- y los más perjudicados eran el de bienes no esenciales (-2,01 %), materias primas (-1,85 %) y el tecnológico (-1,79 %),
Entre las empresas del Dow Jones destacaban las pérdidas de Nike (-5,26 %), Salesforce (-3,01 %) y Home Depot (-2,33 %), mientras que las que me ganaban era McDonald’s (0,85 %), Chevron (0,37 %) y Verizon (0,25 %).
En otros mercados, el petróleo de Texas subía 109,41 dólares el barril, el rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años subía a 3,10 %, el oro ascendía hasta los 1.880,2 dólares por onza y el dólar perdía terreno frente al euro, con un cambio de 1,056.