Para llegar a estos hogares en áreas de difícil acceso, pequeñas casas de barro y madera, pero con una tierra muy productiva, los funcionarios de ANATI necesitan 2 horas de camino no asfaltado por pendientes pronunciadas.
Unas 300 familias de Veraguas recibieran los títulos de propiedad de sus tierras, que los acreditan como dueños legalmente constituidos de sus propiedades, de parte de la Autoridad Nacional de Administración de Tierras (ANATI).
De acuerdo con una nota de prensa de esta institución, sus colaboradores de la Unidad Técnica Operativa invirtieron tres horas de camino, cruce de ríos y subidas de pendientes, sin carretera de asfalto, para llegar al destino y proceder con la entrega de los respectivos títulos de propiedad.
“Durante una jornada de cinco días por áreas como Chitra, Soná, Las Palmas, Las Guías, La Laguna, Las Cruces, Río de Jesús y San Bartolo, personal de la ANATI visitó estos hogares entregándoles las escrituras de sus propiedades; muchos de ellos con más de 40 años de cultivar la tierra que, finalmente, les pertenece”, destacó la información.
“En estas áreas encontramos familias -anotó la comunicación- como las de Eduardo Barsallo, dedicada a la ganadería; o la de Régulo Núñez, quienes emplean su terreno para la agricultura. También, Federico Barrios, de San Bartolo, otro ganadero que ha criado por más de 30 años, pero las tierras donde pastan sus reses no tenían un título de propiedad”.
“Estoy muy agradecido… No saben cuánto había esperado por este documento, de las tierras donde mi familia ha trabajado por años”, resaltó Barrios.
“En Las Cruces, Cañazas, una joven señora -cabeza de hogar de una humilde familia- esperaba por el equipo de la UTO. La alegría de la señora Geovany González fue envolvente, al saber que las tierras donde ha vivido por 40 años, heredada de sus padres y de las cuales ha sustentado a su familia, a través de la agricultura de subsistencia, tiene título de propiedad”, puntualizó.
El comunicado oficial destacó que, “para llegar a su hogar, una pequeña casa de barro y madera, pero con una tierra muy productiva, se necesitan 2 horas de camino no asfaltado por pendientes pronunciadas”.
“Una emoción muy grande. Lloré cuando llegué allí, porque antes no existía ni carretera, ahora, aunque sea de tierra, pero pudimos ingresar y hacer esto realidad…”, sostuvo Angélica Ureña, coordinadora de la UTO de Veraguas.
Ureña relató que, “por primera ocasión se logró ingresar en vehículo hasta los hogares de esta área montañosa; generalmente las personas salían a lugares de menor dificultad para acceder y allí se les entregaban sus títulos”.
“Cuando iba en esa loma me asusté un poco, pero la alegría mi hizo olvidar porque, por primera vez, pudimos llegar hasta este sitio en auto, y fuimos hasta las casas. Eso me regocija”, concluyó.