Se trata del proyecto Jolgorios Matemáticos, puesto en marcha por FUNDAPROMAT, el cual recibe el apoyo de 14 voluntarios de Panamá, Colombia, España, Chile, Guatemala, Perú, México y Argentina.
Una iniciativa que inició en noviembre del año 2020 se ha consolidado en un proyecto desarrollado por la Fundación Panameña para la Promoción de las Matemáticas (FUNDAPROMAT), el cual recibe el apoyo de 14 voluntarios de Panamá y de otras naciones como Colombia, España, Chile, Guatemala, Perú, México y Argentina.
En esa fecha se empezaron a desarrollar los Jolgorios Matemáticos que consisten en eventos virtuales interactivos para toda la familia que se llevan a cabo todos los sábados a las 10:00 a.m. (hora de Panamá), donde se explora el universo de las matemáticas mediante actividades amenas y de colaboración en un ambiente divertido.
La Dra. Jeanette Shakalli, directora ejecutiva de FUNDAPROMAT, explicó que a la fecha se han realizado 71 Jolgorios Matemáticos, gracias al apoyo de 14 voluntarios que apoyan como facilitadores desde Panamá (2), Colombia (1), España (1), Chile (2), Guatemala (1), Perú (1), México (2) y Argentina (4).
Según la directora ejecutiva de FUNDAPROMAT, ese apoyo, tanto en territorio panameño como internacional, ha sido “fundamental para que este proyecto haya tenido un enorme éxito con muchos beneficios para el mensaje de que las matemáticas resultan de extrema utilidad para la vida diaria y, además, de paso contribuimos a destruir muchos mitos y estereotipos que existen alrededor de esta ciencia”.
“El trabajo de nuestros voluntarios de los Jolgorios Matemáticos ha demostrado ser exitoso no sólo porque estos eventos virtuales han continuado a través de los años sino también porque más de 7,750 personas han participado a la fecha. Nuestros participantes provienen tanto de Panamá como de países de habla hispana de todo el mundo”, destacó Shakalli.
Voces de apoyo
Marleny Vargas de Chiriquí (Panamá), destacó que se involucró en el trabajo de FUNDAPROMAT como una manera de contribuir a que las matemáticas sean accesibles al mayor número de personas posible.
“Actualmente una de mis funciones consiste en ser facilitadora en los Jolgorios Matemáticos donde se explora una actividad divertida. También apoyo a la Fundación en la creación de las bases de los concursos que hemos organizado. Además, he diseñado actividades para los Jolgorios Matemáticos, he sido miembro del jurado en varios concursos de la Fundación y formé parte del Comité Editorial de la Revista Factorial, entre otras. Soy docente de matemáticas en la provincia de Chiriquí, en el nivel de secundaria y el trabajo que he realizado en FUNDAPROMAT me ha ayudado para poder llevar las matemáticas de forma diferente a mis alumnos”, destacó Vargas.
La docente panameña resaltó que, “cada experiencia en FUNDAPROMAT se transforma en anécdotas. En los Jolgorios Matemáticos cada sábado podemos experimentar la riqueza de diversas formas de pensamiento que tienen las personas de nuestra comunidad. Es maravilloso ver cómo una niña de 7 años Ximena logra el mismo objetivo que un joven de 15 años y un adulto mayor. En el Jolgorio no se limita la forma de pensamiento. Todos pueden proponer sus respuestas y hay libertad para discutirlas, no hay respuestas malas y creo que esto es lo que hace de los Jolgorios una actividad tan exitosa”.
Por su parte, María Cristina Monachelli, de Argentina, afirmó que la experiencia como voluntaria de FUNDAPROMAT le brinda nuevos aprendizajes “continuamente y permite relacionarme y conocer profesionales a nivel internacional”.
“Los compañeros con su generosidad me enriquecen tanto profesional como personalmente. Los voluntarios de la Fundación hemos conformado una familia con fuertes vínculos de afecto y aprecio. Gracias a ellos he crecido como persona y como docente. Explorar las actividades de los Jolgorios Matemáticos con mis alumnos hace que derriben barreras en su relación con las matemáticas más rápidamente”, afirmó Monachelli.
Mientras tanto, Rafa Oliver, de España, relató que durante la pandemia se enteró de un webinario de matemagia organizado por FUNDAPROMAT que le pareció interesante y por eso, se registró lo cual le “despertó la curiosidad con los siguientes eventos virtuales que se hicieron y participé en todos los que pude, así como en los Jolgorios Matemáticos. Al cabo del tiempo me invitaron a ser voluntario y acepté, pues me pareció justo ayudar en esta labor que me había entretenido tanto durante el confinamiento”.
“Principalmente ayudo en los Jolgorios Matemáticos, tanto en el diseño de las actividades como en su desarrollo con los participantes todos los sábados. También colaboro en los webinarios a los que puedo asistir como co-anfitrión. He conocido a mucha gente de muchos países con una afición en común: las matemáticas. Gracias a ellos he conocido ramas de las matemáticas que desconocía y han despertado mi curiosidad”, declaró Oliver.
El venezolano Ramón Martínez, quien reside en Panamá, declaró que actúa como “facilitador o anfitrión en los Jolgorios Matemáticos. Además, soy parte del equipo que diseña las actividades que exploramos en esos eventos virtuales. En los eventos presenciales, apoyo en la parte logística y en el entrenamiento de los nuevos voluntarios. También coordino las visitas a las instituciones educativas, así como las giras que realizamos al interior del país. Dicto charlas interactivas, tanto virtuales como presenciales, a docentes y/o alumnos donde informamos acerca de todos los recursos y eventos gratuitos y abiertos a todo público que ofrece la Fundación”.
“Cada Jolgorio Matemático representa una anécdota distinta, observando cómo niños, jóvenes y adultos comparten y exploran una actividad matemática en un ambiente festivo. Roynnelt de Panamá cuenta chistes, Héctor de Bolivia comparte adivinanzas, María Fernanda de Guatemala toca el piano, Ángel de Guatemala muestra sus dibujos y sus juguetes, Yessthanie de Panamá y Alma de Argentina presentan sus mascotas… definitivamente ahí se gozan las matemáticas,” ilustró Martínez.
El voluntario Martínez agregó que, gracias a FUNDAPROMAT, “he aprendido muchísimo. Por ejemplo, anteriormente solamente compartía aquello que me parecía interesante a mí. Ahora he descubierto que muchas cosas que para mí son triviales o de poco interés, para muchos niños pueden ser sorprendentes y fascinantes. Esto lo he presenciado más de una vez y; por supuesto que descubrirlo me ha permitido mejorar mi labor como educador”.