Para el gremio, es imprescindible que la austeridad sea el eje de cualquier actividad institucional, de tal manera que los recursos se dirijan a estimular la economía y promover el empleo.
En un comunicado de prensa, el Consejo Nacional de la Empresa Privada (CoNEP), destacó que ha sido persistente en llamar a un gran diálogo nacional.
“Estimamos que, en democracia, los problemas se resuelven mediante el diálogo y no a través de actos de violencia o de posiciones extremas. Resulta evidente que la crisis económica que atravesamos, cuyas causas inmediatas son externas, ha producido una sensible y evidente afectación a la ciudadanía. El alza del costo de la vida es una realidad”, afirmó.
Precisó que las protestas son parte de los derechos de los ciudadanos y se deben respetar, siempre que se desarrollen dentro de los contornos de lo que señala la constitución y la ley.
“Censuramos la conducta de sectores que promueven el radicalismo y que creen que la imposición irracional debe ponerse por encima del estado de derecho y la democracia”, puntualizó.
Asimismo, reiteró el llamado a que el gobierno haga profundas rectificaciones en su forma de gestión, de tal manera que se profundice la transparencia y la comunicación permanente con los ciudadanos.
“Es imprescindible que la austeridad sea el eje de cualquier actividad institucional, de tal manera que los recursos se dirijan a estimular la economía y promover el empleo. Sin ese espíritu de cambio, será difícil generar confianza. Debemos entender que la ausencia de rendición de cuentas y el clientelismo, son un veneno para la democracia”, aseveró CoNEP.
Dijo que el gobierno los ha invitado a ser observadores de un proceso de diálogo cuyo facilitador será Monseñor Ulloa. “Fieles a nuestra tradición de aportar ideas y esfuerzos por mejorar nuestro país, hemos decidido participar en el proceso que se ha convocado”, profirió.
Agregó que es importante que quienes asistamos, nos despojemos de prejuicios y sesgos ideológicos. Resulta vital que acudamos con ánimo de entendimiento y no con espíritu contencioso y destructivo.
“Llamamos a deponer las actitudes de conflicto para lograr los acuerdos que permitan que nuestros niños y jóvenes regresen a clases, que nuestra economía se reanime, generando empleos y que nuestro país renazca, saneado en sus costumbres para que podamos lograr progreso y desarrollo social”, sentenció.