El asalto a los tres poderes, que sumió en el caos a Brasilia durante cuatro horas y media del domingo, ocurrió justo una semana después de que el líder progresista Luiz Inácio Lula da Silva asumiera la Presidencia.
El Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino) rechazó el ingreso de forma violenta de manifestantes en las instalaciones del Congreso, la Presidencia y el Tribunal Supremo en Brasilia.
En un comunicado, expresó que “semejante maniobra antidemocrática amenaza seriamente la estabilidad tanto de la sociedad brasileña, como de toda la región”.
Por ello, el organismo regional puntualizó que respalda al gobierno brasileño en el esfuerzo por recuperar el orden, consolidar la democracia y contribuir a un futuro mejor para toda nuestra América.
El pasado domingo, radicales bolsonaristas intentaron un golpe de Estado en el país sudamericano con el asalto a las sedes de la Presidencia, el Congreso y la Corte Suprema.
El Parlatino, localizado en ciudad de Panamá, es un organismo intergubernamental de ámbito regional, permanente y unicameral.
Está conformado por 23 Estados miembros.