“No tenemos nada que ver con esto”, dijo Zelenski al ser preguntado por una periodista ucraniana por las informaciones aparecidas recientemente en “The New York Times” y en la revista alemana “Spiegel” que apuntarían a un grupo pro-ucraniano como autor del supuesto sabotaje.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, negó hoy cualquier conexión de su gobierno con las explosiones que dañaron el pasado mes de septiembre los gasoductos Nord Stream, que conectaban Rusia con Alemania.
“No tenemos nada que ver con esto”, dijo Zelenski al ser preguntado por una periodista ucraniana por las informaciones aparecidas recientemente en “The New York Times” y en la revista alemana “Spiegel” que apuntarían a un grupo pro-ucraniano como autor del supuesto sabotaje.
El jefe del Estado ucraniano señaló que la aparición de estas informaciones podrían tener como objetivo “ralentizar el envío de ayuda a Ucrania”, y tildó estas noticias de “desinformación”.
“Creo que es muy peligroso que ciertos medios independientes, por los que siempre he tenido un gran respeto, estén dando estos pasos”, agregó Zelenski. “Creo que es un error, y que sólo beneficia a la Federación Rusa” o a “grupos económicos que están interesados en que no se adopten sanciones fuertes” contra Rusia.
Zelenski no especificó a qué grupos se refería, pero sí dijo que “estos grupos” que se verían afectados por las sanciones “pueden estar también fuera del territorio de Rusia”.
El presidente ucraniano habló de países que “apoyan a Ucrania de manera condicional para cubrir el expediente” mientras “por otro lado se saltan las sanciones”, “ganan decenas de miles de millones de dólares” y “han incrementado su comercio con la Federación Rusa” desde que comenzó la invasión.
Zelenski hizo estas declaraciones en Kiev durante una rueda de prensa conjunta con la primera ministra de Finlandia, Sanna Marin, que visitó hoy la capital ucraniana.