Los cortes de pencas se realizan en alrededor de 200 palmas reales por día de trabajo.
Por tradición desde hace 30 años consecutivos, el expresidente de la Asamblea Nacional, Elías Castillo, realiza el corte de pencas de Palma Real para ser distribuidas en las parroquias de la ciudad capital con el fin de ser entregadas el Domingo de Ramos a los feligreses que asisten a misa.
Es una tarea ardua que el veterano político realiza junto a colaboradores y amigos desde que sale el sol en la finca de su propiedad en Río Chico, corregimiento de Pacora, en apoyo a las iglesias y la Arquidiócesis de Panamá.
Con machete en mano, su equipo de trabajo y amigos monte adentro realizan el corte de pencas de la palma real, que luego son transportadas en un camión para su entrega desde Pacora un día antes del Domingo de Ramos.
Castillo afirmó que la quema por parte de inescrupulosos afectó dos hectáreas donde están sembradas palmas reales y explicó que una penca que es extraída del centro del árbol, produce hasta 300 palmas.
La actividad en algunas ocasiones se torna un tanto riesgosa porque al momento de subir la palma, quienes realizan los cortes pueden encontrarse con animales silvestres como serpientes, iguanas, monos perezosos e insectos como abejas africanizadas, hormigas y mosquitos y es cuando hay que ser precavido para evitar contratiempos.
Regularmente, los cortes se efectúan el viernes antes del Domingo de Ramos por la calidad de las pencas para luego ser entregadas a las parroquias y bendecidas por los sacerdotes para la celebración de las misas del Domingo de Ramos en recordación de nuestro señor Jesucristo cuando entró triunfante a Jerusalén, donde fue recibido por el pueblo que agitaba palmas.
La costumbre en Semana Santa es que las personas se llevan las hojas de las pencas para sus hogares con el propósito de la confección de cruces y también compartirlas con quienes no asistieron a misa.
Los cortes de pencas se realizan en alrededor de 200 palmas reales por día de trabajo y gracias a Dios no se vio afectada una de las hectáreas donde están sembradas para poder extraer las pencas para el Domingo de Ramos.