Álvaro de Marichalar detalló que la alta contaminación marítima “es un drama”: “Nos estamos comiendo ese plástico a través de la cadena alimenticia, ya que se convierte en microplástico y los peces lo comen. Eso es muy peligroso, muy triste y somos responsables”.
Luchar contra los plásticos en los océanos, uno de los “problemas más graves de la humanidad”, es el motivo por el que el español Álvaro de Marichalar está dando la vuelta al mundo en la considerada la embarcación más pequeña de la historia en intentarlo, y ahora se encuentra en Panamá, una escala crucial.
“Lo llevo diciendo 40 años: luchar contra un problema enorme, uno de los más graves a los que se enfrenta no solo la humanidad sino todo el ecosistema marítimo y terrestre, que son los vertidos plásticos”, dijo a EFE Marichalar en las ruinas de Panamá Viejo, la primera ciudad española en ese país.
De Marichalar llegó a Panamá el pasado 17 de marzo sobre “Numancia”, su moto de agua, considerada la embarcación más pequeña de la historia de la navegación en dar la vuelta al mundo, tras recorrer parte del Caribe después de reiniciar la expedición el año pasado desde Miami.
El navegante español comenzó esta travesía marítima el 10 de agosto de 2019 cuando zarpó desde Sevilla, sur de España, para conmemorar el V Centenario de la Primera Vuelta al Mundo iniciada por Fernando de Magallanes en 1519. Sin embargo, la pandemia de la covid-19 paralizó por dos años la aventura.
Además de homenajear esa primera vuelta al mundo, el aristócrata español pretende con esta travesía concienciar sobre el cuidado del medio ambiente, en concreto de la contaminación marítima que producen los plásticos. Y destacó que quiere sensibilizar especialmente a las generaciones más jóvenes.
“Estamos tirando a la mar un millón de toneladas de plástico al día. Dentro de poco, dice la ONU que si seguimos así el peso del plástico va a superar al de los peces en los océanos y los mares”, explicó Marichalar.
De Marichalar detalló que la alta contaminación marítima “es un drama”: “Nos estamos comiendo ese plástico a través de la cadena alimenticia, ya que se convierte en microplástico y los peces lo comen. Eso es muy peligroso, muy triste y somos responsables”.
“Entonces, estamos haciendo un movimiento mundial que se llama ‘Guardianes del Mar’ por el cual convencemos a los más pequeños, también mayores, que se conviertan en paladines del sentido común, de la naturaleza, de los ecosistemas marinos”, agregó.
POR TERCERA VEZ CRUZARÁ EL CANAL DE PANAMÁ
De Marichalar cruzará en los próximos días por tercera vez el Canal de Panamá, desde Colón, la entrada del Caribe, hasta la ciudad de Panamá, en el Pacífico, con “Numancia”, la moto de agua que presume calcomanías de los países que ha visitado, los escudos de su familia y la frase “Viva España”.
“Voy a cruzar el Canal de Panamá y me emociona porque será la tercera vez que lo hago. La última fue en la fecha histórica más importante del Canal, a las 12 de la mañana del 31 de diciembre del 1999, el momento en que Panamá recuperaba la soberanía” de la vía acuática, explicó.
En aquella ocasión, De Marichalar atravesó la vía interoceánica en la “primera embarcación que cruzó el Canal de Panamá, siendo ya Panamá soberana de su canal”.
“Pude exhibir las cuatro banderas involucradas en la historia del Canal, España, Francia, Estados Unidos y Panamá. Ya sabemos que España fue la primera iniciativa de hacer un canal por Carlos I de España, el mismo que financió la primera vuelta al mundo”, apuntó.
De Marichalar tiene una vinculación histórica con Panamá, pues su antepasado Miguel Francisco de Marichalar fue el gobernador de ese país cuando supuestamente el pirata inglés Henry Morgan incendió Panamá Viejo, ruinas sobre las que este jueves Álvaro protagoniza un evento sobre la expedición, organizado por la Cámara Oficial de Comercio de España.
El navegante continuará su vuelta al mundo subiendo por la costa pacífica americana, cruzará desde Alaska a Rusia para proseguir a lo largo de todo el continente asiático hasta el Mediterráneo y terminar en Mónaco y después Sevilla.