La Autoridad Nacional de Administración de Tierras informó que, el pasado mes de abril, otras 56 familias fueron beneficiadas con los títulos de propiedad de sus terrenos.
Los títulos de propiedad de sus tierras, documento que legaliza sus predios y devuelve la esperanza de brindar a sus generaciones un legado, recibieron unas nueve familias como la de Elsa de Guerrero, quienes construyeron su hogar hace 49 años en San Vicente, corregimiento de Chilibre, de parte de la Autoridad Nacional de Administración de Tierras (ANATI).
“Mi mensaje a todas las familias que reciben sus títulos es que no vendan; esto nos ha costado muchos años soñando por tener este documento en nuestras manos… Yo no vendería porque es lo único que puedo dejar a mis hijos”, sostuvo la señora Elsa.
Al igual que esta peticionaria de sus tierras, otras 9 familias recibieron las escrituras de sus tierras; Juan Ruiz, también residente de Chilibre, esperó este documento legal por 16 años.
“Estoy feliz, esto es algo muy importante porque se lo dejo a mi esposa y mi hija… Algo muy importante que todo ciudadano debe tener es su título y uno lo necesita para vivir en paz y dejar algo a nuestras generaciones”, comentó.
Anayansi Peñalosa, hace 35 años llegó a Chilibre buscando prosperidad para su familia. Allí se radicaron e iniciaron una historia de vida. En la actualidad escribe un nuevo capítulo, al recibir en sus manos el título de propiedad que, finalmente, la acredita como dueña legítima de ese pedacito de Panamá, seiscientos metros de terreno donde tiene su hogar.
Para Pablo Emilio Gómez, director regional del Área Metropolitana de la ANATI, este es un logro familiar, pues la entidad está para “servir al prójimo”, nuestros peticionarios.
“Es el momento propicio para agradecer al pueblo que nos da la oportunidad de servirles, con un equipo de trabajo que está detrás para realizar esta tarea como institución y sacar adelante los procesos que finalizan en la entrega de un título a estas familias”, destacó Gómez.
Añadió que esta entidad se mantiene fiel a su compromiso de ser un instrumento para ofrecer resultados positivos en los peticionarios, contribuyendo a la seguridad jurídica y familiar, que se constituye en el mayor regocijo que un ser humano pueda anhelar, reflejado en las acciones laborales a través de un título de propiedad.
El pasado mes de abril, otras 56 familias fueron beneficiadas con los títulos de propiedad de sus terrenos.