El presente convenio, tiene como objetivo proteger y asegurar la cantidad, la calidad y la utilización sostenible de los recursos hídricos transfronterizos.
Con la firma del Presidente de la República Laurentino Cortizo y de la ministra de Relaciones Exteriores, Janaina Tewaney Mencomo y a solicitud del Ministerio de Ambiente, se aprobó el convenio sobre la protección y utilización de los cursos de agua transfronterizos y de los lagos internacionales, convirtiéndonos en el primer país del continente en adherirnos a este convenio reiterando el compromiso de Panamá como país azul a nivel global.
El presente convenio, tiene como objetivo proteger y asegurar la cantidad, la calidad y la utilización sostenible de los recursos hídricos transfronterizos, facilitando y promoviendo la cooperación internacional desde todas sus esferas. Además, busca prevenir, controlar y reducir el impacto transfronterizo, a fin de garantizar, entre otras cosas, que se controle y reduzca en su origen la emisión de contaminantes mediante la aplicación de, entre otras cosas, tecnologías de desechos escasos o nulos.
El convenio además contempla el apoyo técnico y financiero para la gestión integrada de las cuencas hidrográficas transfronterizas, siendo este vinculante con el cumplimiento de la Ley No. 44 de 5 de agosto de 2002, “Que establece el Régimen Administrativo especial para el manejo, protección y conservación de las cuencas hidrográficas de la República de Panamá “.
Panamá ha dado un ejemplo valioso en materia de cooperación transfronteriza, digno de replicar, con nuestro vecino Costa Rica, con quien se comparten 4 ríos y en el cual se destaca el mecanismo de cooperación transfronteriza del Sixaola, que bajo el más alto deseo político de sus gobernantes, se administra la cuenca hidrográfica que involucra directamente a las autoridades locales y sociedad civil de ambos países.
La canciller Tewaney Mencomo destacó en la Asamblea General de las Naciones Unidas, en el marco de la segunda Conferencia de Agua de la historia de la ONU el pasado marzo: “El agua, más que un instrumento de conflicto puede ser un instrumento de paz y cooperación entre países vecinos y un ejemplo de nueva gobernanza incidiendo en el territorio local, pues el Gobierno central al más alto nivel traslada responsabilidades locales a aquellos a quienes les impacta directamente el uso y protección de sus ríos.”