Determinar subtipos de la enfermedad y su perfil genómico e identificar nuevas terapias o cuál es la más adecuada para el paciente son algunos de sus beneficios.
Más de 2.2 millones de casos de cáncer de pulmón se detectan anualmente en el mundo y cerca de los dos tercios de dichos casos no producen síntomas o presentan signos muy inespecíficos, generando que muchos de los diagnósticos de la enfermedad se den en etapas avanzadas. A pesar de estas cifras, el panorama del diagnóstico y del tratamiento de cáncer de pulmón ha ido evolucionando, en los últimos años, gracias a la medicina de precisión.
Este tipo de medicina, también conocida como personalizada, usa la información de los genes o proteínas de un paciente para precisar el diagnóstico, determinar el tratamiento a brindar y si este es o no eficaz en un paciente, así como para dar un pronóstico. Específicamente en cáncer de pulmón, la medicina de precisión ha permitido determinar subtipos de la enfermedad (según rasgos de las células malignas) y su perfil genómico, identificar nuevas terapias con objetivos específicos y definir por qué se da sensibilidad o resistencia ante una terapia dirigida.
Alrededor del 85% de los cánceres de pulmón son de células no pequeñas y cerca del 15% restante corresponde a microcíticos o de células pequeñas. En el caso del cáncer de pulmón de células no pequeñas, se han logrado identificar subgrupos con el marcador tumoral ALK-positivo y otros relacionados con el receptor de factor de crecimiento epidérmico o mutación EGFR.
Según la doctora Rebeca Mora, líder médico de Oncología de Pfizer Centroamérica y Caribe (CAC), la forma más reciente de tratar un cáncer es basándose en el subtipo o subgrupo. Los profesionales de la salud usan análisis de biomarcadores o marcadores tumorales para encontrar dichos subtipos y los resultados muestran cuáles terapias, probablemente, pueden funcionar mejor en la persona. También, ayudan a comprender la composición molecular del cáncer y los posibles cambios en el tiempo; una muestra concreta de medicina de precisión.
“Para Pfizer, la medicina personalizada es una filosofía de trabajo, que nos permite comprender mejor la base biológica de una enfermedad, como el cáncer, y a su vez, crear innovaciones que se adapten a las características de cada paciente y de su padecimiento. Parte de nuestro compromiso con el cáncer de pulmón, que es la principal causa de muerte relacionada con cáncer en el mundo, es ser tan adaptativos y ágiles como la enfermedad misma, a manera de seguir investigando y desarrollando avances para cambiar vidas”, continuó la doctora Mora.
En caso de que el paciente presente síntomas, la tos persistente (asociada o no a expectoración – flemas) es el más común e inclusive, puede acompañarse de sangre hasta en un 50% de los casos. Otros signos son la disnea o falta de aire, el dolor torácico, cansancio y la pérdida de peso sin causa aparente. En ocasiones, los síntomas se dan por la existencia de metástasis en otros órganos como huesos, cerebro, hígado y ganglios linfáticos.
Diagnóstico preciso y una alianza regional como acción clave
Si bien la detección de esta enfermedad puede darse en estadios avanzados, ante cualquier síntoma se recomienda consultar con el médico tratante. Este hará un estudio completo del paciente, incluido a nivel físico, y le podrá referir desde una radiografía hasta una tomografía axial computarizada (TAC), una resonancia magnética cerebral y pruebas de función respiratoria, entre otras, para su diagnóstico. Si se necesitara identificar algún subtipo de cáncer de pulmón o biomarcador, puede que la persona también requiera una biopsia.
Resulta necesario destacar que no todas las personas con un posible cáncer de pulmón pueden tener alteraciones o mutaciones detectables mediante las pruebas disponibles hasta ahora. Ante esto, siempre es importante la correcta valoración de cada paciente.
Ahora bien, con el objetivo de brindar un diagnóstico preciso y un plan de atención personalizado a los pacientes con cáncer de pulmón metastásico, Pfizer, en conjunto con AstraZeneca y Roche, establecieron una alianza regional llamada “Precision Medicine Alliance. One genome, One team”, que agilizará el acceso a pruebas de perfilamiento genómico.
“A través de dichas pruebas, se analizan ampliamente 324 genes del tumor para identificar alteraciones clínicamente relevantes, lo que permite al médico acceder a un informe claro y detallado que apoya la toma de decisiones clínicas, acelerando así los tiempos en diagnóstico, tratamiento y abordaje de los pacientes según su necesidad. Específicamente, esperamos impactar a 131 personas, durante todo el año 2023, en Centroamérica y Caribe, brindando las pruebas de forma gratuita”, comentó la doctora Mora.
Tratamiento personalizado
Hasta hace poco tiempo, las opciones de tratamiento del cáncer de pulmón consistían solo en cirugía, así como en quimioterapia y radioterapia, para casos en donde la operación no era viable o como terapia previa o posterior a una cirugía. Sin embargo, los avances en la comprensión molecular de este tipo de cáncer allanaron el camino hacia un tratamiento más personalizado, particularmente en enfermedad avanzada.
Además de la cirugía, quimioterapia y radioterapia, en los cánceres de pulmón de células no pequeñas también se pueden usar las terapias dirigidas. Estas bloquean el crecimiento de las células malignas y las atacan, sin afectar las sanas. En lo que a medicina de precisión respecta, estas terapias se usan con más frecuencia en tumores avanzados, así como en pacientes con mutaciones genéticas concretas o biomarcadores.
Otra opción es la inmunoterapia, la cual ayuda a estimular el sistema inmunitario del paciente para que reconozca y ataque las células cancerosas.
“Uno de los avances más importantes en términos de abordaje del cáncer, sin duda, es la medicina de precisión. Sus múltiples beneficios, desde permitirnos establecer decisiones terapéuticas con base en las características de cada paciente hasta diagnosticar correctamente un tipo específico de cáncer y evaluar la eficacia de un tratamiento, han marcado la diferencia en la atención del cáncer de pulmón y han devuelto la esperanza a quienes lo padecen, en pro de una mejor calidad de vida”, concluyó la doctora Mora.