Asamblea General de la ONU aprobó resolución que demanda un inmediato alto al fuego en Gaza, mientras Israel inunda los túneles de Hamas
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reconoció que Israel pierde apoyo internacional por sus acciones en Gaza, y puso en tela de duda la estrategia de inundar los túneles de Hamás. Rechazó, al mismo tiempo, una resolución de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para un alto al fuego.
El gobernante estadounidense es del pensamiento que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, debería “cambiar” su gobierno para encontrar una solución de largo plazo al conflicto con los palestinos.
El pasado 28 de noviembre, en medio de los intensos bombardeos de Israel a Gaza, Estados Unidos fue el único miembro del El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, discutió una resolución que pedía un alto el fuego en la guerra en Gaza, pero la iniciativa descarriló por la complicidad de Washington que vetó una posibilidad de aliviar el martirio de los civiles palestinos.
La Asamblea General de la ONU, escenificó el desquite. 153 países del mundo pidieron un alto al fuego. Solo 10 votaron en contra y 23 se abstuvieron, una forma pasiva de decir que están en contra. Estados Unidos encabezó a los países que votaron en contra, a los que se sumaron Guatemala y Paraguay. Se abstuvieron, entre otros, Alemania, Argentina, Italia y Ucrania.