Para la DEA y el FBI, Saab conoce las fortunas ocultas de Maduro y su séquito, los movimientos de oro y dólares del régimen y los acuerdos con Irán, Rusia y Turquía
“Es posible que (Alex) Saab sea un doble agente de Estados Unidos en Venezuela”, dijo John Bolton, exasesor de seguridad de Donald Trump. Bolton se hizo eco del malestar causado entre distintos sectores en Estados Unidos por el perdón que el presidente Joe Biden le otorgó al empresario colombiano, testaferro del dictador Nicolás Maduro,
“Saab sabía mucho de las finanzas de Maduro y es posible que ya haya informado a las autoridades estadounidenses. Maduro estaba desesperado por tener a Saab de vuelta para que no diera más información”, añadió Bolton, en declaraciones a medios colombianos.
Las palabras del experto en seguridad no solo plantean un escenario probable sino que, además, le complicarían la situación en Caracas a Saab. Si bien el régimen de Nicolás Maduró le dio la bienvenida como un héroe, desde hace meses se filtró la información según la cual la familia de Saab permanecía bajo vigilancia. Hace un año una cuñada de Saab pidió permiso para viajar a Italia para controles médicos y no pudo salir de Venezuela.
Ahora se sabe que Saab podría ser movido a Turquía o a Rusia y que tiene restricciones para viajar al menos a cinco países en los que tiene investigaciones abiertas.
Al escenario que plantea Bolton se une el hecho de que Saab ya había explorado un acuerdo de colaboración con Estados Unidos. Incluso, alcanzó a pactar su entrega. El diario colombiano El Tiempo reveló que antes de que Biden firmara el documento de clemencia, le alcanzaron a ubicar y confiscar $12 millones.
El malestar de sectores estadunidenses también lo han expresado autoridades británicas, italianas, belgas y colombianas que por casi una década rastrearon multimillonarias transacciones corruptas de Saab. Todos están desconcertados de cómo Biden firmó el perdón que puso fin a los 1,280 días en prisión de Saab, capturado en Cabo Verde el 12 de junio del 2020 y extraditado a Estados Unidos en el 2021.
Su detención significó una especie de ‘trofeo’ judicial para agentes de inteligencia que no dudan en calificar a Saab como una de las más importantes fichas corruptas del régimen de Maduro y el guardián de las rutas para llegar a bóvedas con oro y dólares del saqueo a Venezuela.
Para la DEA y el FBI, el colombiano conoce las fortunas ocultas de Maduro y su séquito, los movimientos de oro y dólares del régimen y los acuerdos con Turquía, Rusia e Irán.
En la investigación en su contra por una megaoperación de lavado de activos, superior a los $350 millones, se le señala de ser el poder corruptor para torcer opositores, infiltrar blancos y hasta espiar para Maduro.
Saab llegó a estar tan acorralado legalmente que luego se supo que empezó a negociar con la DEA la entrega de información y hasta su sometimiento.
Saab poseía un lujoso apartamento en el bulevar Saint Germain, de París, y en otro en la Via dei Condotti, una cotizada zona de Roma. También le localizaron una mansión en Estambul, yates, cinco aviones privados, obras de arte, más sus bienes en Colombia. Aún no se sabe qué tiene en Rusia y qué parte es de él y qué de otros corruptos de Venezuela.
Pero mientras el Departamento de Justicia de Estados Unidos nutría el indictment de Saab con evidencia, el Ejecutivo negociaba su libertad.
“El perdón de Saab hace parte de un acuerdo más ambicioso, que incluye desde el control a la migración, pasando por la habilitación de la oposición para que participen en las elecciones presidenciales de 2024 en Venezuela, hasta la liberación de presos”, explicó una fuente federal.
Existe la versión de que Saab tiene varios secretos del régimen y las claves para abrir bóvedas con dólares y lingotes, algunas de las cuales tienen acceso con sistema biométrico con los datos de Saab.
Por ahora, el régimen de Maduro, que posterior a su captura había nombrado a Saab embajador plenipotenciario en África, le acaba de otorgar un nuevo cargo: ficha del equipo en la mesa de diálogo con la oposición.
Aunque por el momento parece difícil, no es imposible, que Saab vuelva a caer en manos de la DEA si Maduro incumple acuerdos o si el colombiano sigue con sus negocios oscuros.