El gobierno tomó represalias contra la organización humanitaria por denunciar el trato brutal y violación de migrantes
Luego de la expulsión de Médicos Sin Fronteras (MSF) de Darién, el Ministerio de Salud (MINSA) anunció el supuesto contrató de cinco médicos, técnicos y personal de enfermería para reforzar los puntos de atención en Bajo Chiquito y Las Lajas, informó esa institución en un comunicado.
La regional del MINSA en Darién y la Cruz Roja Panameña sostuvieron una reunión esta semana para tratar de fortalecer la atención en salud a los migrantes irregulares.
El MINSA reiteró que, el personal sanitario responsable de brindar atención médica a los migrantes que cruzan por estos puestos, debe llenar los formularios utilizados en la atención de pacientes cuando se determinen enfermedades como malaria, dengue, encefalitis e incluso informe de sospecha de violencia sexual.
Según el MINSA, una de las razones de la cancelación de las operaciones de MSF en Darién, se dio porque no compartían los expedientes completos de las víctimas de violencia sexual.
Ese señalamiento fue negado por MSF, organización humanitaria que trabaja en 70 países, a la vez que denuncio que en las primeras cinco semanas de este año 233 migrantes sufrieron agresiones sexuales por parte de criminales en Darién.
El MINSA canceló el convenio de colaboración con MSF el 31 de diciembre, a pesar que la organización humanitaria trató de renovarlo desde octubre. Las autoridades de salud bloquearon esa posibilidad.
MSF, que operaba en Panamá desde el 2018, atendía unos 50,000 migrantes mensualmente.