La situación. El país se avoca a unas elecciones presidenciales claves para nuestro pueblo y el gobierno está obligado a asegurar la paz interior de Panamá. El poner orden en nuestras fronteras es responsabilidad del actual gobierno, cuyo presidente Cortizo dice estar listos para “una transición democrática y ordenada”
Los métodos anteriores de control en la frontera con Colombia han fracasado, por múltiples factores externos para Panamá como son las campañas políticas en Estados Unidos y México. Esos países adoptan nuevos controles de sus fronteras, bloqueando el ingreso de los migrantes, lo que producirá en las próximas semanas una situación de congestionamiento de migrantes en ruta hacia el Norte, afectándonos directamente en Panamá en tiempos políticos.
Las amenazas. Más amenaza hay en la frontera con Colombia, por el flujo migratorio, que el conflicto que el gobierno está creando con la embajada de Nicaragua.
Como consecuencias de las guerras en desarrollo en Gaza, Ucrania, las acciones violentas en Haití y Cuba, aumenta el riesgo de migraciones como el caso de iraníes, palestinos, haitianos, cubanos, colombianos huyendo de la guerra.
En Colombia el cambio de la política del presidente Petro al dar órdenes al ejército de atacar a las disidencias de las FARC, produce un nuevo escenario de guerra.
En menos de tres meses aumentó el desorden en la frontera. Enumero algunas novedades.
- Los migrantes se amotinan y queman los campamentos por protestas violentas.
- Se infiltran terroristas del grupo libanés Hezbolá, capturados después en la frontera con
Estados Unidos, demostrando una falla de seguridad de Panamá.
- Aumenta el flujo de migrantes iraníes.
- Es una ruta de ingreso de carteles del narcotráfico como el Tren de Aragua y otras organizaciones criminales como las de Ecuador que huyen de la presión militar.
- Ruta de ingreso de reos prófugos haitianos.
- Mala imagen del país por la expulsión de la organización humanitaria internacional, Médico sin Fronteras, por la denuncia de violaciones sexuales a los migrantes por parte del SENAFRONT y Migración.
- Porosidad en la frontera. Hoy está bajo el régimen de organismos no gubernamentales con formatos de manejos internacionales, no en función de nuestros intereses nacionales.
Algunas propuestas. Defender la nación panameña, custodiar la frontera. El gobierno se debe a su pueblo, no a intereses de organizaciones no gubernamentales, la ONU y sus agencias.
Se hace urgente cambiar. Deben aplicarse contramedidas activas para asegurar la paz interna y en defensa de nuestros intereses vitales como el Canal y la estabilidad necesaria para el desarrollo de nuestra democracia que hoy está en campaña política.
Cesar la política actual de “consideraciones humanitarias”. Esa política ha fracasado y de alguna forma viene incentivando la migración irregular y peligrosa, donde se infiltran terrorista, pandillas criminales como el Tren de Aragua, los reos escapados de las cárceles de Haití y la actual crisis interna en Cuba con estallidos sociales.
Se hace necesario cambiar el régimen por el de defensa interna de Panamá.
- Declarar zona de emergencia la zona de fronteras. Suspender las garantías en la frontera por 90 días prorrogables.
- Una sola autoridad será la responsable en la zona de frontera.
- Crear una Fuerza de Tarea, con la Policía Nacional, Migración, MINSA, SENAFRONT. Organizar un puesto de mando unificado, permanente.
- Crear campamentos con régimen especial de detención. Filtrar terroristas, indeseables y buscados por la INTERPOL. Las actuales medidas de aplicación de pruebas biométricas, no están funcionando.
- Cambiar el régimen “humanitario” al de seguridad interior.
- Declarar la frontera cerrada por motivos de nuestras elecciones en mayo. Panamá y su gobierno están obligados a garantizar la paz interna para el buen desarrollo de nuestra democracia.
Le hago un llamado a la actual administración que está terminando. Dejen la frontera con Colombia, lo más ordenada posible. Es su deber y responsabilidad.
Analista de Seguridad y Defensa.