Según Human Rights Watch, el gobierno de Kenia no actuó a tiempo ni respondió de manera adecuada a las graves inundaciones
El número de muertos por las devastadoras inundaciones causadas por por las lluvias torrenciales que golpean Kenia desde mediados de marzo ascendió a 210, mientras unas 165,500 personas se han visto desplazadas, según el Ministerio keniano del Interior, informaron este viernes medios de prensa internacional.
Para responder a esta crisis, señaló el Ministerio, las autoridades kenianas han creado al menos 115 campos distribuidos en 19 de los 47 condados del país, donde se han refugiado más de 27,500 personas.
El gobierno publicó estos datos después de que el ministro keniano del Interior, Kithure Kindiki, instara este viernes a moverse a todos los kenianos que residen en zonas vulnerables a deslizamientos de tierra o cercanas a presas y ríos.
“El gobierno ha adoptado medidas adecuadas para proporcionar alojamiento temporal, así como suministros esenciales alimentarios y no alimentarios a todos aquellos que se verán afectados por el desalojo”, señaló el ministro.
Las graves tormentas se prolongarán al menos hasta la próxima semana, y las lluvias seguirán siendo intensas durante este mes, según la predicción del Departamento de Meteorología de Kenia.
En los últimos años, la temporada larga de lluvias, que va de marzo a mayo y afecta también a otros países del este de África, se ha visto intensificada por el fenómeno meteorológico de El Niño, un cambio en las dinámicas atmosféricas ocasionado por el aumento en la temperatura del océano Pacífico.