Estados Unidos teme que la flota rusa, compuesta por otros dos barcos, vaya a participar en maniobras militares
La próxima semana Cuba y Rusia revivirán su tradicional alianza con un acto de notable simbolismo que, según temen algunas fuentes en Estados Unidos, puede ser una excusa para llevar a cabo unas maniobras militares en las que participe lo mejor de la flota rusa, informaron medios de prensa internacional.
La próxima semana el puerto de La Habana recibirá un destacamento naval ruso compuesto por tres barcos y un submarino nuclear en el marco de una “visita se corresponde con las históricas relaciones de amistad entre Cuba y la Federación de Rusia y se acoge estrictamente a las regulaciones internacionales” suscritas por La Habana, según se ha apresurado a aclarar el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso.
La nota no especifica si se trata de ejercicios militares, en contra de las informaciones publicadas recientemente en que se apuntaba, de fuentes estadounidenses, que barcos rusos viajaban hacia el mar Caribe para participar en unas maniobras y que podían parar en puertos de Cuba y Venezuela.
“Ninguno de los navíos es portador de armas nucleares, por lo que su escala en nuestro país no representa amenaza para la región”, aclaró la cancillería cubana, que indicó asimismo que “las visitas de unidades navales de otros países es una práctica histórica” con naciones con quienes el país mantiene “relaciones de amistad y colaboración”.
Los barcos que componen el destacamento naval ruso son, según el comunicado, la fragata Gorshkov, el submarino de propulsión nuclear Kazan, el buque petrolero de la flota Pashin y el remolcador de salvamento Nikolai Chiker.
La fragata rusa Almirante Gorshkov, la nave líder de la última generación de fragatas de la armada rusa, efectuó en enero del 2023 un ejercicio para entrenar el lanzamiento de misiles hipersónicos Tsirkon en el Atlántico mediante una simulación por computación.
En febrero del 2023 participó en unos ejercicios conjuntos junto a Sudáfrica y China, y en marzo pasado se sumó a los ejercicios conjuntos que llevaron a cabo las armadas de China, Irán y Rusia en el golfo de Omán.
Por su parte, el Kazan es un submarino de propulsión nuclear con capacidad para disparar misiles de crucero que entró en funcionamiento en el 2021.