Destitución obedece a la existencia de “graves acusaciones” que hacían “insostenible” su permanencia en el cargo
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva destituyó a su ministro de Derechos Humanos, Silvio Almeida, para poner fin a un escándalo que salpicaba al gobierno a pocas semanas de las elecciones municipales del 6 de octubre, informó el diario catalán El Periódico.
Lula tomó la decisión después de que varias mujeres denunciaran a Almeida por acoso sexual ante la oenegé Me Too Brasil, conocida por su defensa de las víctimas de agresiones de esa naturaleza.
La situación detonó un problema al interior de la coalición que encabeza Lula porque una de las denunciantes es Anielle Franco, la ministra de Igualdad Racial y hermana de Marielle Franco, uno de los símbolos de la defensa de los derechos humanos de Río de Janeiro, cuyo asesinato, en el 2018, conmovió al país.
De acuerdo con el diario carioca ´O Globo`, Lula le dio a Almeida la posibilidad de renunciar durante una conversación mantenida en el Palacio de Planalto. Las acusaciones, le subrayó, eran muy graves.
Ante la negativa de su todavía ministro, y su declaración de inocencia, Lula, siempre según la publicación, tuvo una respuesta enfática: “Entonces estás despedido”.
La Secretaría de Comunicación Social consignó que la destitución obedeció a la existencia de “graves acusaciones” que hacían “insostenible” su permanencia en el cargo.
Con la salida de Almeida ya son siete de los 37 ministros que abandonan su puesto desde que comenzó la tercera era del líder del Partido de los Trabajadores (PT), pero es el segundo que debe irse en medio de repercusiones que afectan al oficialismo.