El campo demócrata ha endurecido las críticas contra el expresidente y candidato republicano, a quien acusa de comportamiento errático
Misión: romper el empate en las encuestas a falta de dos semanas para las elecciones del 5 de noviembre. Kamala Harris corteja este lunes a los republicanos moderados en el “cinturón de óxido” y Donald Trump a los indecisos en zonas devastadas por el huracán Helene en Carolina del Norte, informaron medios de prensa internacional
La vicepresidenta y candidata demócrata a la Casa Blanca recorre parte de Pensilvania, Michigan y Wisconsin, en el este del país, acompañada por la exparlamentaria republicana Liz Cheney, una adversaria a ultranza de Trump.
El campo demócrata ha endurecido las críticas contra el expresidente y candidato republicano, a quien acusa de comportamiento errático.
El pasado fin de semana el millonario ha dejado boquiabiertos a muchos con comentarios groseros, como cuando mencionó el ”increíble” pene del fallecido golfista Arnold Palmer y llamó a Harris “vicepresidenta de mierda”.
Después de tratar de seducir a los obreros el sábado y freír papas en un McDonald’s el domingo, el magnate de 78 años de edad puso rumbo a Carolina del Norte.
En ese estado devastado por el paso del huracán Helene repitió teorías conspirativas que acusan al gobierno de Joe Biden y a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) de redirigir los fondos para desastres para traer migrantes ilegales y reforzar los votos demócratas.
Y volvió a atacar a Harris. “No creo que esté cualificada para presentarse. Creo que es una amenaza para nuestra democracia”, afirmó.
Ella hizo otro tanto: “Es un hombre poco serio, pero las consecuencias de que sea presidente de Estados Unidos son brutalmente serias. Hay cosas que dice que serán objeto de sketches, risas y chistes, pero las palabras tienen significado”, sostuvo en Pensilvania.
Según cifras publicadas el lunes, el equipo de campaña de Harris gastó $270 millones en septiembre, frente a $78 millones del equipo de Trump.
La vicepresidenta, que cumplió 60 años de edad el domingo, ha recaudado más de $1,000 millones desde su entrada en campaña en julio, tras la retirada del presidente Biden, algo nunca visto para un trimestre, informa The New York Times.
A la vista de los sondeos, esta ventaja financiera no se traduce en capital electoral.
.En los siete estados clave para las elecciones presidenciales (Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Carolina del Norte, Arizona, Nevada y Georgia) los últimos sondeos publicados el lunes por The New York Times continúan dando a los rivales codo con codo.
Lo mismo en una encuesta realizada por The Washington Post: 47% tiene la intención de votar por Harris y otro tanto por Trump.