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Carteles terroristas extranjeros, la guerra secreta

Carteles terroristas extranjeros, la guerra secreta
Mayor Felipe Camargo A., analista de Seguridad y Defensa.

La designación como fuerzas terroristas a los carteles como el Tren de Aragua, y la M-13 y los mega-carteles mexicanos, mediante la orden ejecutiva firmada por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, es una línea operativa que Panamá debe priorizar en sus actuales misiones inteligencia.

El tema de los carteles, no es solo el tráfico del fentanilo, se expandieron al control del tráfico de migrantes ilegales. Esa es hoy la amenaza real.

Esas dos armas estratégicas de ataque a Estados Unidos concebidas con intenciones letales, son una amenaza real empleando un tipo de “guerra asimétrica“. Lo peor es que están siendo controladas, dirigidas y conducidas por agentes de inteligencia de China comunista. Como parte de la guerra secreta en contra de nuestro principal socio estratégico: Estados Unidos.

La guerra secreta

Esta última parte no es nueva, de las actividades secretas de China. Pero sí, poco conocid el desarrollo silencioso empleando métodos clandestinos de la toma del mando y control de las principales pandillas que operan dentro de las grandes ciudades estadunidenses.

La guerra silenciosa que se está desarrollado desde dentro de las grandes ciudades gringas, ya es un objetivo tomado, aplicando un tipo de guerra no convencional o tradicional como lo conocemos, con ataques terroristas, coches bombas, asesinatos y secuestros.

Es otro el método actual de ataque. Es minando la juventud estadunidense, con el fentanilo la “droga zombi”.

Son las pandillas que venden el fentanilo, que están bajo el mando y control de agentes de inteligencia chinos. Ese es el escenario actual. Esa guerra ya la tienen los gringos dentro de su territorio.

Hasta el 2017, China producía el 97% del fentanilo que se vendía en el mundo.

En junio de ese año, el expresidente Juan Carlos Varela estableció las relaciones diplomáticas con China. Viajaron delegaciones oficiales del más alto nivel de la seguridad e inteligencia de Panamá. En ese momento el ministro Seguridad, y el director del Consejo de Seguridad Nacional, viajaron a China y se reunieron con las principales autoridades chinas de Seguridad e Inteligencia.

En la época militar abrimos esos tipos de contactos en búsqueda del apoyo, y la solidaridad internacional al esfuerzo nacional en lucha contra los Estados Unidos con objetivos del interés nacional, para rescatar nuestra soberanía.

Ahora ese escenario no existe. Son otros los escenarios de conflictos.

 

La post verdad

Esos hechos son antecedentes muy claros que la nueva administración gringa, se aprovecha para construir una narrativa, entre medias verdades y medias falsedades. Lo que se conoce como “post verdad”.

Pero Panamá sí ha dado motivos para que se construya esa narrativa falsa, distorsionada con objetivos del interés nacional gringo.

El nuevo escenario de conflicto bélico es el Indo Pacífico, con una invasión de China a Taiwán sobre el tapete.

Panamá estaría involucrado directamente en ese escenario bélico, por ser el Canal la puerta de entrada al Pacifico. Con un factor de seguridad perjudicial para el esfuerzo de guerra de Estados Unidos, al tener los dos principales puertos bajo control de empresas con sede en Hong Kong territorio chino.

En el 2023 China suspendió toda la cooperación relacionada con drogas con los Estados Unidos, por el aumento de las maniobras militares chinas sobre Taiwán.

La retórica del actual presidente Trump, se nos puede convertir en una realidad, con otro tipo de colonización, por lo que hay que enfrentarla defiendo los intereses nacionales.

 

Guerra de propaganda

Les recuerdo a nuestros internacionalistas que sean realistas, pragmáticos.

Hay antecedentes históricos del uso de la “guerra de propaganda”, aplicado en todas las guerras. Desde el inicio de la segunda guerra mundial en 1939, cuando Hitler usó la mentira para invadir Polonia.

Más recientemente Bush en el 2003 inventó otra gran mentira de las armas de destrucción masiva para invadir a Irak. Nunca se llegaron a encontrarse y cuya existencia no quedó demostrada. Así se violaron todos los pactos y leyes internacionales, usando a la ONU para sus intereses. Y sufrimos la invasión de 1989, sobre la retórica del narco Estado y solo se llevaron a Noriega.

La seguridad interna de los Estados Unidos está íntimamente relacionada con Panamá. Esa es una interpretación con la lógica militar del general Omar Torrijos válida hoy: “Estamos bajo el paraguas del Pentágono”.

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