Navarro y la Coordinadora Ciudadana se inclinan por el cierre de Pan Am Generating de La Chorrera por afectaciones al ambiente, mientras el presidente se opone
Pese a que el ministro de Ambiente, Juan Carlos Navarro, dijo que “no hay espacio en Panamá para plantas termoeléctricas como la de La Chorrera, que contaminan y afectan la salud de la población” y no descartó tomar una decisión sobre su cierre definitivo, Mulino advirtió que la planta no sería cerrada.
Nadie va a cerrar ninguna planta aquí. Nadie. Si esa planta se puede arreglar, como me dijeron, pues tendrá que volverse a calibrar, hacer los ajustes que correspondan para que vuelva a integrarse”, dijo Mulino este jueves.
De acuerdo a Raúl Ossa, abogado de la Coordinadora Ciudadana, “la termoeléctrica incumple las leyes ambientales y representa un riesgo para la comunidad”.
Ossa solicitó al mandatario considerar “el sufrimiento de los ciudadanos afectados, cumplir y hacer cumplir la ley y la normativa ambiental y, en consecuencia, imponer las medidas rectificativas de rigor”.
El presidente aclaró que, por ahora, la planta se mantendrá separada del sistema hasta que concluyan las investigaciones.
Sin embargo, según el informe, Ossa considera que el mandatario con sus declaraciones “reviste de impunidad a una empresa que incumple con las normas ambientales”.
“La salud es primero. Lo expresado por el señor presidente muestra indolencia ante el sufrimiento de los chorreranos, que por más de una década venimos denunciando las afectaciones que estamos padeciendo por los peligros para nuestra salud y nuestros bienes debido a las emanaciones tóxicas, ruidos, vibraciones e incendios”, señala Ossa en nombre de la Coordinadora Ciudadana.
Actualmente, el presidente está a la espera del informe que realiza el Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá (BCBRP) sobre la explosión de un transformador en la termoeléctrica, lo que también es investigado por el Ministerio Público, el Ministerio de Ambiente e incluso la Empresa de Transmisión Eléctrica (ETESA).