El caso investiga presuntos pagos cataríes desde mayo de 2002 a octubre de 2024 a al menos dos de sus asesores más cercanos
El papel que tuvieron Eli Feldstein y Jonatan Urich, dos de los asesores más cercanos del jefe del régimen israelí, Benjamín Netanyahu, en el conocido como caso Catargate, que investiga pagos recibidos para difundir historias favorables al país árabe entre la prensa israelí, ha vuelto a resonar con fuerza esta semana después de su arresto, informó la agencia EFE.
La detención se llevó a cabo este pasado lunes y concluyó en su envío a prisión provisional durante 72 horas ordenado por el juez instructor del caso, Menachem Mizrahi. Este viernes, un juzgado ordenó que ambos pasen a arresto domiciliario.
Los hechos también salpicarson a Netanyahu quien el mismo lunes fue llamado a declarar como testigo.
“Todavía no sabemos si Netanyahu era conocedor de la relación de sus asesores con Catar. Lo que sí está claro es que aquí ha habido una brecha de seguridad muy grave en la Oficina del Primer Ministro”, explica Tal Elovits, analista y asesor político israelí.
El bautizado como caso Catargate, destapado en parte por el periódico israelí Haaretz, investiga presuntos pagos cataríes desde mayo del 2002 a octubre del 2024 a al menos dos de los asesores más cercanos de Netanyahu con un objetivo: Mejorar la imagen del país árabe en Israel.
Lo que ha trascendido hasta el momento del caso, bajo secreto de sumario hasta el 13 de abril, es por una parte la campaña mediática liderada por Urich y por Israel Einhorn, otro asesor, para mejorar la imagen de Catar antes del Mundial de Fútbol del 2022.
“Estos asesores fueron contratados por el gobierno de Catar antes de que empezara el Mundial para conseguir que los israelíes viajaran al país como turistas”, detalla Elovits.
Por otra parte, el último escrito del juez instructor también señala que una empresa estadounidense, supuestamente propiedad del lobista de Catar Jay Potlik, estableció contacto con Feldstein para que difundiera a periodistas mensajes negativos sobre Egipto como mediador entre Israel y Hamás, con el objetivo de “elevar el perfil de Catar” en el asunto de la liberación de rehenes y el alto el fuego en Gaza.
“Lo que tenemos aquí es el asesor más cercano y el portavoz de Netanyahu con su propia empresa privada asesorando al Gobierno de Catar. O traicionaron a Netanyahu, o llevaron adelante esto por estupidez”, indica el analista.
A Netanyahu en estos últimos meses se le han acumulado varios asuntos con la justicia. Este lunes, mientras testificaba en su juicio por corrupción, tuvo que abandonar antes de lo previsto la audiencia para ir a declarar después del arresto de sus dos asesores.
“Lo preocupante aquí es que todo esto está pasando mientras Israel está en guerra. Catar ahora mismo no es simplemente otro país, como lo podíamos ver durante la campaña del mundial, ahora es un mediador en las negociaciones para el alto el fuego en Gaza. Aquí hay un conflicto de intereses”, apunta Elovits.