Rechazan la represión, exigen liberación de los detenidos y solicitan a los gremios docentes y sindicalistas, tender un puente de comunicación
La Coordinadora Nacional de Pueblos Indígenas de Panamá (COONAPIP), hizo un llamado urgente al presidente José Raúl Mulino a formalizar una mesa de diálogo nacional con los diferentes gremios que se encuentran en paro y que protestan en diferentes puntos del país.
Las autoridades tradicionales piden igualmente a los gremios docentes, a los grupos sindicales y a los diferentes sectores que abran espacio para un diálogo que ayude a crear un puente necesario de comunicación, evitando que el conflicto persista con consecuencias irreversibles para los más humildes.
COONAPIP, que aglutina a los líderes indígenas de los siete pueblos y 12 congresos y consejos, expresó su profunda preocupación ante las manifestaciones y protestas que se registran en el país.

En medio del actual conflicto en la calle, la COONAPIP igualmente hace un llamado a las autoridades de gobierno y del orden público a respetar los derechos humanos.
“Rechazamos categóricamente la represión contra nuestro pueblo, que cese la persecución contra los dirigentes, la liberación inmediata de los detenidos y exigimos que se imponga la razón y no la violencia”.
La COONAPIP indicó que se mantiene en alerta máxima y reitera el llamado al diálogo como único instrumento para encontrar caminos de solución a los principales problemas (seguridad social, soberanía y explotación de minas) que hoy afectan al país y donde debe imperar la justicia y la democracia y no la confrontación.

Instó a hacer un alto para tratar a través del diálogo, “los temas prioritarios en los que tenemos que ponernos de acuerdo todos los sectores, porque nos afectan y afectan la estabilidad del país”.
Los dirigentes indígenas reiteran el “llamado al gobierno nacional a buscar un consenso con todos los gremios y organizaciones que protestan, buscando ese entendimiento que favorezca un clima de paz que todos necesitamos para seguir avanzando como nación”.
La COONAPIP advierte que, como organización, les “preocupa la situación de confrontación que afecta directamente, con saldo negativo hacia los pueblos originarios, como ya ha ocurrido en el pasado, con lamentables saldos de muertos y heridos, y no se puede permitir que esto vuelva a ocurrir”.
Los dirigentes indígenas reiteran la preocupación por la seguridad de los pueblos indígenas y solicita que el gobierno y las organizaciones en protesta establezcan una mesa de diálogo urgente, sin precondiciones, “con la firme convicción de que se pueden encontrar soluciones por el bien del país y sin imposiciones de una sola parte”.