Trump ha apuntado que el conflicto ahora ya es “algo diferente de lo que era”, pese a haber frenado a Rusia
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha afirmado que su Gobierno sigue “trabajando duro” para tratar de poner fin a la guerra en Ucrania y ha asegurado que los contactos entablados en las últimas semanas suponen “una buena oportunidad” para lograr algún avance, sin descartar de hecho que pueda terminar pidiendo algún tipo de intervención por parte de China, informó la agencia Europa Press.
Trump ha apuntado en declaraciones a los medios en el Despacho Oval la Casa Blanca que el conflicto ahora ya es “algo diferente de lo que era”, hasta el punto de que considera que, si Estados Unidos no se hubiese implicado en términos diplomáticos, Rusia podría haber logrado avances aún mayores.
Así, confía en poder poner fin al “baño de sangre” tarde o temprano. Trump ha delegado los contactos directos con las partes en su enviado Steve Witkoff y, según el magnate, tiene “una relación fantástica” tanto con Rusia como con Ucrania. “Es un verdadero profesional”, ha dicho de él.
Por otro lado, sobre una posible petición a China para que intervenga, Trump ha señalado que esta intervención puede ser “natural”, el mismo día en que el dictador ruso, Vladimir Putin, ha recibido en Moscú con todos los honores a su homólogo chino, Xi Jinping, uno de los invitados estrella a los actos por el Día de la Victoria.