La región de tierras bajas ha tenido una buena cosecha de cebolla la cual será complementada en los próximos meses
El mercado panameño se encuentra actualmente abastecido de cebolla nacional, según confirmaron productores de tierras altas y bajas del país, a pesar de ello, reportan una disminución en el consumo debido a factores económicos y situaciones sociales que han afectado la dinámica comercial.
Lorenzo Jiménez, presidente de la Asociación de la Comunidad Productora de Tierras Altas (ACPTA), indicó que se han sembrado alrededor de 1,200 hectáreas, lo que ha permitido satisfacer la demanda interna con producto de alta calidad.
“En la actualidad, el país se encuentra abastecido del rubro en su totalidad. Ya tenemos dominado el mercado con cebolla nacional de muy buena calidad”, expresó Jiménez.
Desde Coclé, el productor Novie Calderón destacó que la región de tierras bajas ha tenido una buena cosecha de cebolla, la cual será complementada en los próximos meses con la producción de tierras altas.

“Hay buena oferta, pero el consumo se ha reducido un poco por las situaciones que se han dado en el país. Aun así, sigue siendo un negocio rentable”, afirmó Calderón.
En cuanto a precios, Calderón explicó que la libra de cebolla se cotiza entre $0.90 y $1.00, aunque el Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA) ofrece el rubro en las ferias libres a $0.20 y el precio en finca ronda los $50 por quintal.
Por su parte, el presidente de la Cooperativa de Cebolleros de Natá, Gerardo Ramos, añadió que el abastecimiento nacional está garantizado al menos hasta junio, cuando tradicionalmente se da una transición en la producción entre regiones.
En ese contexto, la cadena agroalimentaria aprobó la importación de 300 mil quintales de cebolla, prevista para ese mes.
“En este mes debemos reunirnos nuevamente para realizar los análisis pertinentes y asegurar que el ingreso del producto importado no afecte a los productores locales”, explicó Ramos.
El gremio productivo considera que, aunque el consumo está temporalmente afectado, la calidad y cantidad de la cebolla nacional permiten cubrir la demanda interna.
A su vez, instan a las autoridades a mantener un control responsable de las importaciones y apoyar las ventas locales, especialmente en momentos de transición productiva.
