“Bajo la presidencia de Trump, hemos asignado $7 millones adicionales a Panamá para repatriar a migrantes ilegales”, anunció el embajador estadunidense Kevin Cabrera
Estados Unidos anunció que incrementará el financiamiento para seguir impulsando un programa de deportaciones de migrantes irregulares desde Panamá, en el marco de una gira que inició la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, por América Central, informó el medio dominicano Listín Diario, citando agencias de prensa internacional.
Noem arribó el martes a Ciudad de Panamá y se reunió con el mandatario José Raúl Mulino, en el primer día de un periplo que la llevará esta semana a Costa Rica, Honduras y Guatemala, como parte de un viaje cuya agenda está centrada en temas de migración y seguridad fronteriza.
“Bajo la presidencia de Donald Trump, hemos asignado $7 millones adicionales a Panamá para repatriar a migrantes ilegales y poner fin a la inmigración ilegal”, anunció el embajador estadounidense Kevin Cabrera en su cuenta oficial de X, en una jornada en la que acompañó a la secretaria de seguridad en sus actividades en Panamá, incluyendo el encuentro con Mulino en casa presidencial.
El nuevo aporte se suma a los $6 millones que ya aportó Estados Unidos como parte del acuerdo de cooperación migratoria firmado el 1 de julio del 2024 durante la toma de posesión de Mulino.
Noem asistió tras el encuentro con el gobernante panameño a un aeropuerto de la capital para observar un vuelo de deportación de 32 colombianos con destino a Medellín y dijo que estos “pueden ser un ejemplo para otros países”.
“Los Estados Unidos están más que dispuesto a ayudar, a compartir los costos de esto para garantizar que estos países tomen en serio su responsabilidad de aceptar a sus ciudadanos de regreso en sus países”, añadió.
Con este vuelo se ha alcanzado la cifra de 53 en los que se han deportados o expulsados 2,346 extranjeros desde la entrada en vigor del acuerdo migratorio.
Washington ha alcanzado acuerdos con varios países, entre ellos Panamá y Costa Rica, para albergar a migrantes porque algunos países no aceptan a sus ciudadanos deportados desde Estados Unidos tales como Laos, Myanmar o Vietnam.
Las autoridades panameñas y estadunidenses no contestaron sobre si este tema fue abordado durante el encuentro entre Noem y Mulino.
Noem insistió en que “es esencial que los buques de guerra y las embarcaciones auxiliares estadunidenses transiten libremente por el Canal”, en una reiteración de las exigencias del presidente Trump de que los buques militares e inclusive comerciales de su país deben cruzar gratuitamente por esa importante vía marítima comercial, lo que Panamá ha objetado.
Mulino sostuvo que es el interés de Panamá cooperar con Estados Unidos en temas de seguridad e inteligencia para enfrentar el crimen organizado, el narcotráfico y el terrorismo internacional.
En la agenda bilateral también se incluyó la posibilidad de ampliar la asistencia técnica por parte de Estados Unidos en áreas como vigilancia costera, control aeroportuario y tecnologías de detección, así como mecanismos para agilizar los procesos de repatriación, con especial atención a ciudadanos venezolanos que son la mayoría de los migrantes que están retornando del norte hacia el sur del hemisferio en medio de las agresivas políticas contra la inmigración de Trump.