El consumo per cápita de alimentos acuáticos en la región es de apenas 11 kilos al año, por costos y porque existe la creencia de que no llena el estómago
En América Latina y el Caribe, el pescado aún es visto como un alimento costoso y poco saciante, lo que mantiene bajo su consumo en comparación con otras regiones del mundo, así lo advierte la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que considera reeducar tanto a los consumidores como a los productores para revertir esta tendencia, informó la agencia EFE.
Durante la décima cuarta reunión de la Comisión de Pesca en Pequeña Escala, Artesanal y Acuicultura para América Latina y el Caribe (COPPESAALC), celebrada en Panamá, el oficial principal de pesca y acuicultura de la FAO en la región, Javier Villanueva, explicó que el consumo per cápita de alimentos acuáticos en la región es de apenas 11 kilos al año, frente al promedio mundial de 20.7 kilos.
“Uno de los grandes retos para nosotros es incrementar ese consumo. Necesitamos estrategias para acercar los productos a la gente, que sean inocuos y asequibles”, afirmó Villanueva.
Según el funcionario, el pescado suele asociarse erróneamente a productos de lujo o de temporada, lo que limita su presencia en la mesa cotidiana.
Sin embargo, destacó que existen más de 3,000 especies marinas aptas para el consumo humano, lo que permite diversificar la dieta y reducir los precios mediante cadenas de distribución más cortas.
Otro obstáculo cultural que enfrenta el consumo de pescado es la percepción de que no llena tanto como otras proteínas.
Villanueva aclaró que esta idea es errónea, la fácil digestión y alta densidad nutricional del pescado lo convierten en un alimento ideal, especialmente en la lucha contra la malnutrición.
“Nos dicen que los niños no se sienten satisfechos cuando comen pescado, pero en realidad están recibiendo todos los nutrientes necesarios, y muchas veces más, en porciones menores”, dijo Villanueva.
La FAO estima que para mantener el consumo actual hacia el 2050, será necesario aumentar la producción acuática en al menos un 13%.