Su redacción actual representa una carga operativa y administrativa considerable para el Estado
El presidente José Raúl Mulino objetó por inconveniente el proyecto de ley 12, que busca modificar la Ley 99 de 1998 para cambiar oficialmente el nombre de la Comarca Kuna Yala a Gunayala, de acuerdo a información del diario Panamá América.
Aunque el mandatario respaldó los objetivos culturales del proyecto, señaló que su redacción actual representa una carga operativa y administrativa considerable para el Estado, al no contemplar mecanismos de implementación ni plazos de transición.
La principal objeción del Ejecutivo se centra en el artículo 2 del proyecto, que ordena a todas las instituciones públicas y privadas utilizar de forma inmediata la nueva denominación en documentos oficiales como decretos, resoluciones y textos, sin establecer un tiempo prudente ni reglamentación para hacerlo.
Esto, según el presidente, generaría confusión, desorganización y una sobrecarga institucional.

“Resulta inconveniente que el texto no contemple una cláusula que indique expresamente que, para todos los efectos legales, el Órgano Ejecutivo está facultado para reglamentar su aplicación, permitiendo que tanto instituciones públicas como actores privados realicen los ajustes requeridos de forma ordenada y progresiva”, indica el documento firmado por Mulino.
El proyecto, tal como fue aprobado por la Asamblea, establece que la ley entre en vigor un día después de su promulgación, lo que dejaría al Ejecutivo sin capacidad para dictar una reglamentación previa que permita una transición estructurada.
El mandatario subrayó que comparte y respeta el espíritu de reivindicación cultural del pueblo Guna, pero alertó que el proyecto de ley, en su forma actual, es inconsciente tanto en su alcance como en sus efectos jurídicos y administrativos.

Instituciones como el Ministerio de Gobierno y el Ministerio de Educación también respaldaron la objeción del Ejecutivo, al advertir que el cambio implicaría un esfuerzo logístico y presupuestario que no ha sido dimensionado adecuadamente, ni respaldado por lineamientos técnicos.
La diputada Flor Brenes, proponente del proyecto, defendió la iniciativa, asegurando que su propósito es hacer justicia al pueblo guna, reconociendo correctamente el nombre del territorio que han habitado ancestralmente.
ara ella, el cambio de “Kuna Yala” a “Gunayala” fortalece la identidad, cultura e historia de las comunidades indígenas.
“Este proyecto le hará justicia al pueblo gandule al designar y mantener su nombre propio al territorio donde han habitado ancestralmente”, afirmó Brenes.
El proyecto ha sido devuelto a la Asamblea Nacional para que se realicen las adecuaciones necesarias que permitan su implementación ordenada.
Se espera que en las próximas semanas se convoque a una mesa técnica con representantes del Ejecutivo, el Congreso Guna y expertos legales para trabajar en una nueva redacción que combine reconocimiento cultural con viabilidad operativa y jurídica.