Puede recibir la denuncia, enviar a medicatura forense y remitir las pruebas a la Corte Suprema de Justicia para su evaluación
El diputado de la bancada Seguimos, Betserai Richards, presentó este martes una denuncia formal ante el Ministerio Público contra su colega Bolota Salazar, miembro del Partido Revolucionario Democrático (PRD), a quien acusa de haberlo agredido físicamente en las instalaciones de la Asamblea Nacional.
“Fuimos al complejo hospitalario Arnulfo Arias Madrid, donde me realizaron una revisión médica, incluyendo un CAT, que confirmó agresiones físicas y afectaciones internas”, declaró Richards al salir del Ministerio Público.
Explicó que ya sostuvo una conversación con el procurador general de la Nación, Luis Gómez, quien le confirmó que, si bien, la Corte Suprema de Justicia (CSJ) es el órgano competente para investigar a diputados, el Ministerio Público puede recibir la denuncia, enviar a medicatura forense y remitir las pruebas a la CSJ para su evaluación.
Richards solicitó que se aplique el máximo peso de la ley, no solo por la agresión física, sino también por lo que calificó como una amenaza de muerte por parte de Bolota. “Es inaceptable lo que ocurrió. Vamos a conversar con los fiscales y pedimos justicia”, enfatizó.
El diputado Bolota reaccionó a la denuncia a través de su cuenta de Instagram, donde criticó a algunos medios de comunicación por, según él, emitir juicios sin conocer su versión de los hechos.
“Hay límites que un hombre no puede tolerar, y más cuando la agresión va dirigida a lo más sagrado que tiene un ser humano. Están acostumbrados a ofender y denigrar para luego victimizarse”, publicó el diputado oficialista.
Añadió que tiran la piedra y esconden la mano, en aparente alusión al comportamiento que atribuye a Richards y sus simpatizantes.
El incidente ha provocado fuertes reacciones dentro del Órgano Legislativo. La Asamblea Nacional (AN) ya anunció que el caso será remitido al Comité de Ética, que deberá evaluar los hechos y determinar posibles sanciones conforme al reglamento interno.
La institución también expresó su rechazo categórico a cualquier forma de violencia entre diputados, subrayando que la AN debe ser un espacio para el debate democrático, el respeto mutuo y la convivencia cívica, y no para confrontaciones físicas.