Para comprender la dinámica del poder político hoy en las Garzas, hay que tomar en cuenta a las fuerzas externas estratégicas que gravitan en San Felipe, actualmente enfrentadas en una guerra comercial.
Tienen a sus operadores, agentes infiltrados, las quinta columnas operando al lado del poder. Es el arte fino del espionaje para influir en las tomas de decisiones o desinformar.
Hacer creerle al presidente Mulino que está consolidado, que una gran parte del país lo respalda en sus decisiones políticas como el aplastamiento del Suntracs, el manejo del garrote en la crisis de la Ley 462, para impedir el cierre de las vías y la censura a la principal columna de opinión del periódico democrático.
Es un winner. Un ganador.
Pero resulta que cuando se expone al pueblo, como lo fue en el escandaloso abucheo y al grito de “asesino”, no corresponde con la realidad que le hacen creer al presidente.
Durante mi época de escolta del general Omar Torrijos, como método operativo normal era analizar el ambiente del pueblo en una presentación o inauguración a la que asistía el comandante jefe.
Se hacía una planificación para cada evento público donde iba a presentarse. Así se hizo en la gran concentración por los tratados del Canal, en la plaza 5 de mayo. El 16 de junio de 1978 participaron juntos, en un acto de masas, el presidente estadunidense Jimmy Carter y el general Torrijos, en visita oficial para participar en los actos de ratificación de los Tratado Torrijos-Carter.
Evaluábamos factores como ventajas, riesgos y desventajas políticas y las amenazas de posibles reacciones violentas. Y otros escenarios que significaron una amenaza a la integridad personal e imagen política de PMI (Persona Muy Importante).
Ese análisis se le presentaba al general Torrijos, con todos los factores con los riesgos. Si asistía o no iba. Pero se cumplía con la misión de proteger al PMI.
Un factor clave era si no asistía, ¿que se perdía o que se ganaba? Esa pregunta, debieron de analizarla los expertos de seguridad del gobierno empresarial.
Si no asistía ganaba más, se podía mantener la actual retórica de la propaganda del Estado con “paso firme”. Pero al asistir, y por no haber podido manipular el entorno, se volvió en contra su presentación. Quedó expuesto el presidente.
Esa “novedad” presidencial de rechazo, la recogen en sus informes, las embajadas lo reportan a sus respectivos gobiernos, al igual que el retraso bochornos del pasado primero de julio en el que el cuerpo diplomático se retiró de la Asamblea Nacional.
Surgen preguntas: Se vieron sobrepasados los articuladores de imagen de San Felipe, que no pudieron maquillar el escenario. ¿Lo dejaron meterse de cabeza en la emboscada?
Gobernar no es lo mismo de una campaña política, con supuestamente son expertos en “marketing político”, manejo de escenarios, como si fuera un “marketing comercial” adaptadas al ámbito de la administración del poder presidencial.
La “guerra del engaño y la estratagema” forma parte de la guerra política de China. Hacerle creer al presidente que es un gran ganador. Sus últimas decisiones de aplastar al Suntracs y censurar la columna del diario La Prensa.
“El ganador del Royal Rumble: El primer año de Mulino, como una reciente publicación que corrió por las redes sociales.
“Mulino gobierna hoy con el tinglado para él solo. Sin rivales políticos relevantes, sin contrapesos institucionales y sin una narrativa de oposición cohesionada, este primer año lo ha logrado a sacarlos a todos del ring”.
Sobre ese criterio se fue montado el presidente Mulino al Hipódromo. Fue otra la realidad.
Esa publicación fue subida a la red X. El presidente Martinelli no lo escribió. Fue otro el actor intelectual que lo lanzó de cabeza con la abucheada al coro de “asesino”.
Ni Nito ni Varela, y menos Martinelli, han recibido del pueblo ese rechazo. Solo hay referencia de Manuel Noriega.
Mi conclusión es que los únicos que se beneficiaron fue el Partido Comunista de China. Pasándole la factura al presidente Mulino por la cancelación del acuerdo con China de Iniciativa de la Ruta de la Seda, el pasado 6 de febrero.
Principios básicos de la guerra política China. Vencer sin combatir. La guerra de estratagema. Esa es la diferencia entre el hombre prudente y el ignorante.
Qué significa la Ruta de la Seda Marítima. Control de los espacios vitales, como es el Canal. Control de los puertos de entrada. Desde la visión de la inteligencia naval no es solo que servirán a objetivos comerciales, sino que se enmarcan en el objetivo naval estratégico de China, que es convertirse en una potencia naval.