Autoridades y familiares honran la memoria de los caídos y reiteran el llamado a verdad, justicia y memoria histórica
Panamá conmemoró este sábado el trigésimo sexto aniversario de la invasión de 1989 con un acto solemne encabezado por la Cancillería en el Jardín de Paz, donde reposan los restos de las víctimas del 20 de diciembre, fecha que el país recuerda como Día de Duelo Nacional.
La ceremonia reafirmó el compromiso del Estado con la memoria histórica, la dignidad de los fallecidos y el respeto a los derechos humanos, destaca un comunicado oficial.

El homenaje fue liderado por el ministro de Relaciones Exteriores encargado, Carlos Hoyos, y el viceministro de Asuntos Multilaterales y Cooperación, Carlos Guevara Mann, e incluyó la colocación de ofrendas florales, un minuto de silencio y una salva de 21 cañonazos de la Guardia de Honor Presidencial, además de un acto ecuménico en memoria de los caídos.
Durante la invocación religiosa, el arzobispo José Domingo Ulloa subrayó que el 20 de diciembre es una fecha “marcada con dolor” y advirtió que la herida permanece abierta mientras no se esclarezca plenamente la verdad histórica. Insistió en que recordar a las víctimas no es un gesto simbólico, sino una obligación moral del Estado y un derecho irrenunciable del pueblo panameño.

En representación de los familiares, Trinidad Ayola, presidenta de la Asociación de Familiares de los Caídos del 20 de Diciembre de 1989, reiteró la exigencia de verdad, justicia y reparación, mientras que Rolando Murgas, presidente de la Comisión 20 de Diciembre, destacó la importancia del homenaje como un reencuentro con la verdad histórica y un llamado a la unidad nacional.
Como orador de fondo, el viceministro Guevara Mann señaló que la invasión de 1989 dejó profundas afectaciones a los derechos humanos y planteó reflexiones vigentes sobre soberanía, no intervención y protección de civiles. Destacó que la democracia, el respeto al derecho internacional y el fortalecimiento institucional son lecciones duraderas que el país debe preservar.

Cada 20 de diciembre, Panamá honra a las víctimas de la invasión y renueva su compromiso con la soberanía, la democracia, la paz y la justicia, reafirmando que la memoria histórica es un pilar esencial para la reconciliación y la construcción del futuro nacional.
