Mayor impacto y activar la memoria son unos de los efectos que causa la nueva modalidad que busca informar cualquier tipo de tema a través del dibujo
Alexandre de Maio dibuja para expresar con más fuerza las historias que quiere contar, como si las palabras no fueran suficientes para narrar el crimen, la violencia o la explotación sexual en Brasil.
Nació en Sao Paulo en 1978 y nunca estudió periodismo ni ilustración, pero editó durante una década una revista sobre la cultura hip hop que se convirtió en referencia cuando internet aún no era la avalancha de información que es hoy.
Y es además uno de los pioneros de esta forma de hacer reportajes ilustrados en un país donde la realidad suele estar varios pasos más adelante que la ficción.
“El periodismo en cómic tiene la fuerza del dibujo, nos activa la memoria. Se pueden hacer temas muy complejos con ilustraciones que nos traen distintas referencias, por lo que tiene un impacto más rápido”, aseguró en una entrevista.
Está sentado en la terraza de su apartamento en un barrio antiguo de la zona norte de Sao Paulo, Casa Verde, al otro lado del río Tietê. A lo lejos se ven los grandes edificios del centro de la metrópoli.