“Dime con quién andas y te diré quién eres”, arranca un anuncio de campaña de Joe Biden, el primero en español e inglés desde que el candidato presidencial demócrata anunció a Kamala Harris como su compañera de fórmula.
Como mujer no blanca, hija de inmigrantes, Harris trae a la campaña en Estados Unidos una fuerte dosis de emoción y entusiasmo que ayudará a movilizar el voto de los hispanos, mayoritariamente enfrentados al presidente Donald Trump.
Los latinos serán por primera vez la principal minoría étnica en una elección presidencial, con una proyección récord de 32 millones electores, 13,3% del total, según el instituto Pew.
En las elecciones de 2018, cuando el Partido Republicano de Trump perdió el control de la Cámara de Representantes, 69% de los latinos votaron por demócratas.
Christine Marie Sierra, profesora emérita de Ciencias Políticas de la Universidad de Nuevo México, explicó a la AFP que esta tendencia a favor del partido opositor se mantendrá, pero que la entrada de Harris a la fórmula “puede cambiar el nivel de entusiasmo, lo que se traduce en mayores tasas de votación y posibles victorias en elecciones reñidas”.
“Harris representa una historia de inmigrantes”, hija de una india y un jamaicano, “y eso ya ha generado mucha emoción entre las comunidades de inmigrantes”, añadió.
Criticado por el control de la pandemia y azotado por el desplome económico, Trump vuelve a apelar a su cruzada antimigratoria para agitar a su base y renovar su mandato por otros cuatro años.
“No ve a los inmigrantes como humanos”, zanjó Juan Escalante, un activista venezolano protegido por DACA, el programa creado por Obama -que permite estudiar y trabajar a cientos de miles de indocumentados que llegaron al país de niños con sus padres- y fue eliminado por Trump.
Biden ha enfrentado el escrutinio por su historial sobre inmigración cuando era vicepresidente de un gobierno que deportó a casi tres millones de indocumentados.
“Su récord migratorio tal vez no es el mejor, pero está tratando de proponer soluciones reales a errores pasados”, señaló Escalante, politólogo.
Biden, un moderado, se ha comprometido a restituir DACA, impulsar legislación en el Congreso para legalizar a 11 millones de indocumentados y revertir las políticas de asilo de Trump.
TPS para Venezuela
En 2016, Trump obtuvo el 30% del voto latino, entre los cubano-estadounidenses, que tienden a apoyar a los republicanos, pero también de los veteranos de guerra o los evangélicos centroamericanos.
Y Florida concentra buena parte de ese elector reticente a apoyar a los demócratas.
Christian Ulvert, estratega del Partido Demócrata basado en Miami, explicó que no obstante su partido está conquistando a los descendientes de cubanos más jóvenes, así como a la comunidad colombiana y puertorriqueña.
Con muchos indecisos, aplicarán una campaña “agresiva” a la que Harris “aporta un gran valor”, dijo a la AFP.