¿Alguna vez te has preguntado cuán empático? Considera el consejo de estas cinco personas que han dedicado su vida a estudiar, comprender y practicar la empatía.
¿Alguna vez te has preguntado cuán empático eres? Esta es una prueba simple: lee las noticias, habla con tu jefe, viaja en transporte público, inicia una conversación con alguien que tenga opiniones políticas opuestas a las tuyas, pasa tiempo con tu hijo o pareja, maneja en una calle con tráfico o simplemente pasa 20 minutos en Facebook.
La empatía es la habilidad de comprender las perspectivas, los sentimientos y las experiencias de los demás desde sus puntos de vista en vez del propio. Las investigaciones muestran que cuando las personas sienten empatía por la experiencia de otra persona, es más probable que tengan una visión positiva de esa persona o grupo.
Es importante señalar que la empatía no es compasión. La empatía es interesarse por los demás e intentar compartir sus sentimientos y experiencias. La compasión es preocuparse por ellos y sentir pena o inquietud por su situación.
En caso de que tú, al igual que yo, hayas hecho la prueba antes mencionada y hayas necesitado urgentemente un propulsor de empatía, he conversado con cinco personas que han dedicado sus vidas a estudiar, comprender y practicar la empatía. Estos son sus consejos sobre cómo puedes fortalecer tu empatía:
NEDRA TAWWAB
Si te cuesta sentir empatía por un amigo o un familiar, Nedra Tawwab quiere recordarte algo: no se trata de ti.
“Las personas tienen sus propias historias, y no todo lo que hacen es por ti”, dijo Tawwab. “Simplemente te pasó a ti, pero no se trataba de ti”.
Como terapeuta y la voz detrás de una cuenta popular de terapia en Instagram, Tawwab dice que es importante no etiquetar a las personas como “buenas” o “malas”, sino más bien intentar identificarse con la totalidad de sus experiencias de vida.
“La gente tiene una historia completa, y aunque hayan hecho algo malo o desfavorable, es probable que también hayan hecho muchas cosas buenas y amables en su vida”, dijo, y añadió que esto es cierto en especial cuando se trata de alguien con opiniones intolerantes.
“Creo que es importante considerar cómo esas creencias pudieron haberles servido a lo largo de sus vidas”, dijo. “Por ejemplo, tu abuelo quizá está usando lenguaje que era apropiado cuando era joven en 1937. ¿Le funciona en la actualidad? Por supuesto que no. ¿Puedes establecer límites? Sí. ¿Puedes establecer límites en torno a sus conversaciones? Sí”.
Empatizar con personas que tienen prejuicios puede ser más eficaz para lograr que cambien de opinión que discutir con ellos, afirmó Tawwab, porque te permite exponerlos a una manera de vivir o a un sistema de creencias que tal vez no conocían.
“No nos damos cuenta de lo importante que es exponer a las personas prejuiciosas a cosas que quizá no conocen o las hacen sentir incómodas”, dijo Tawwab. “Creo que esa exposición puede tener más impacto en el cambio de mentalidad de una persona que discutir o crear un desacuerdo”.
Tawwab agregó: “Considera la exposición como una manera maravillosa de generar un cambio”.
BRENÉ BROWN
Unas de las preguntas que le hacen los estudiantes a Brené Brown en su curso de la Universidad de Houston llamado “Vergüenza, empatía y resiliencia” es: “¿Cómo puedo sentir empatía por alguien que vivió algo que yo nunca he experimentado?”.
Para responder a esta pregunta, Brown, una investigadora reconocida y autora exitosa de “Frágil: el poder la vulnerabilidad (Daring Greatly),” le pide a sus estudiantes que levanten la mano si alguna vez han experimentado dolor. Luego desesperación, desesperanza, amor y alegría. Al final, casi todas las manos están levantadas. Brown hace este ejercicio para demostrar que la empatía no se trata de compartir un evento en común, sino de entender la experiencia compartida de una emoción.
“Puede que yo no sepa qué se siente que me separen de mi familia en la frontera, pero sí conozco la impotencia, el dolor, la rabia y la desesperación”, dijo Brown.
A lo largo de 25 años, Brown y su equipo han estudiado la vergüenza y la empatía examinando las experiencias vividas por las personas. Lo que han descubierto es que la empatía es la suma de cuatro habilidades:
1. Mantente alejado de los juicios
2. Asume la perspectiva de otra persona
3. Ponte en el lugar de otra persona
4. Comunica lo que entiendes de la situación que está viviendo otra persona
Brown afirmó que es importante no adoptar las emociones de alguien más al punto de convertirlas en una carga para ti o de apropiarse de una experiencia ajena. “¿De qué sirve que ambos estemos en ese oscuro lugar emocional? Allí no hay ayuda de ningún tipo”, dijo. Brown usa como ejemplo a un amigo que le llama porque tiene un problema marital: “Debo buscar en mí un lugar que entienda ese sentimiento y luego comunicarle de manera poderosa que no está solo, sin asumir ni adueñarme de su dolor”.
Mientras practicas tus habilidades de empatía, con toda seguridad cometerás errores en ocasiones. No debes preocuparte, afirmó Brown, ya que esto en realidad puede ayudar a fortalecer tus relaciones: “Reintentarlo y enmendar una falla empática es tan poderoso, incluso a veces más poderoso, que acertar a la primera”.
ROMAN KRZNARIC
Roman Krznaric cree que la empatía puede cambiar el mundo. Krznaric, filósofo australiano y autor de “The Good Ancestor: How to Think Long Term in a Short-Term World” (“El buen ancestro: cómo pensar a largo plazo en un mundo a corto plazo”), ha estudiado la empatía por años y afirma que ahora la necesitamos más que nunca.
“Estamos enfrentando una carencia crónica y cada vez mayor de empatía”, dijo Krznaric. Un estudio publicado en Personality and Social Psychology Review en 2011 reveló que los niveles de empatía entre los estudiantes universitarios estadounidenses habían caído casi un 50 por ciento durante las últimas tres décadas. Krznaric ofreció varias hipótesis para explicar esto, incluyendo la sociedad moderna, es decir que las personas dedican menos tiempo a participar en actividades sociales que fomentan la sensibilidad empática, además de que “la cultura digital ha creado una epidemia de narcisismo y ha exacerbado la polarización política, la cual divide a las personas en vez de unirlas”. Para contrarrestar esto, Krznaric está decidido a ayudar a las personas a comprender y a practicar la empatía.
Una de las maneras en que lo está haciendo es a través del Museo de la Empatía, una serie de proyectos artísticos participativos que fundó en 2015 con la finalidad de ayudar a las personas a mirar el mundo a través de los ojos de otras personas. Su proyecto más conocido es “A Mile in My Shoes”, una caja gigante de zapatos que viaja por todo el mundo y se llena de montones de zapatos de otras personas. Los participantes pueden usar los zapatos de otra persona, como por ejemplo los de un refugiado afgano o una trabajadora sexual, mientras escuchan una grabación de esa persona hablando sobre su vida y sus experiencias. La exhibición ha estado en nueve países y pronto se presentará en Italia y Eslovenia.
“Dondequiera que vamos, recopilamos nuevas historias y zapatos”, afirmó Krznaric.
Según Krznaric, una de las mejores maneras de desarrollar nuestra empatía en la vida cotidiana es fomentar nuestro interés en otras personas, teniendo conversaciones con gente con la que normalmente no interactuaríamos con regularidad. Krznaric sugiere crearse el hábito de tener una conversación con un extraño una vez a la semana.
KARAMO BROWN
¿Alguna vez soñaste con tener un cambio de imagen empático? Karamo Brown está aquí para ti.
Como uno de los miembros de los “Fab Five” del programa de Netflix “Queer Eye”, Brown ayuda a los sujetos que recibirán el cambio de imagen a encontrar su confianza interna y autocompasión escuchándolos.
“Suelo decir de broma que soy el que menos habla en ‘Queer Eye’ porque siempre estoy escuchando de manera empática”, dijo Brown. La escucha empática, afirmó, es la razón por la que los desconocidos bajan la guardia con él y le comparten detalles personales en apenas cuatro días y medio de rodaje.
“Hablo con ellos durante horas”, dijo Brown, “y lo que hago es hacerles pequeñas preguntas y escucharlos”.
Escuchar con empatía es un concepto que Brown está intentando incorporar a la cultura dominante. Es la práctica de aclarar tu mente y escuchar lo que dice otra persona sin prejuicios ni sesgos preconcebidos.
“No creo que estemos haciéndolo lo suficiente como seres humanos, como país ni como sociedad”, afirmó Brown. “La mayoría de las veces las personas abordan una situación ya queriendo resolver de inmediato los problemas de otras personas”.
Brown le atribuye su habilidad de escuchar sin juzgar a su experiencia de más de 11 años como trabajador social.
“Todos miramos a las personas y de inmediato comenzamos a agruparlas”, dijo. “Cuando trabajas en servicios sociales aprendes a eliminarte de la ecuación y a decir: ‘No eres igual al último niño que estuvo aquí. Tienes tu propia historia’”.
Brown añadió que entendió por primera vez el poder de escuchar cuando su abuela le dijo: “Tienes dos oídos y una boca para que escuches el doble de lo que hablas”.
LESLIE JAMISON
Leslie Jamison ha trabajado arduamente para ser más empática. Cuando tenía veintitantos años, trabajó como actriz médica, haciéndose pasar por personas con problemas médicos para luego evaluar cuánta empatía demostraban los estudiantes de medicina hacia ella. Por lo general interpretaba a una mujer cuyas convulsiones eran causadas por la muerte traumática de su hermano. Los estudiantes de medicina que demostraban empatía y escuchaban su historia llegaban a la causa del problema. Los que la apresuraban o hacían suposiciones quedaban desconcertados. Esta experiencia fue la inspiración detrás del ensayo titular de su libro “The Empathy Exams (Los exámenes de empatía)”. En su ensayo, Jamison argumenta que incluso las formas de empatía memorizadas pueden tener un impacto poderoso:
“La empatía no es simplemente algo que nos sucede —una lluvia de meteoritos de sinapsis disparadas a través del cerebro—, es también una decisión que tomamos: la de prestar atención, la de extendernos. Está hecha de esfuerzo, ese primo desaliñado del impulso. A veces nos preocupamos por otra persona porque sabemos que debemos hacerlo, o porque se nos pide hacerlo, pero eso no significa que nuestra preocupación sea vacía”.
Jamison, quien en la actualidad es profesora de escritura creativa en la Universidad de Columbia, habla con sus estudiantes sobre la idea de replantear la empatía lejos de las concepciones de certeza y conocimiento.
“Mi aproximación a la empatía es algo como: ‘Hay tanto que desconozco sobre el vasto misterio de las experiencias de otras personas, pero ¿de qué maneras pequeñas puedo reaccionar a ese desconocimiento?’”. A veces, afirmó, la mayor demostración de empatía es decirle a alguien que no puedes comprender lo que está sintiendo en vez de decirle algo típico como “eso debe ser difícil”.