Los artistas, escritores o creadores que deseen financiación de sus iniciativas con recursos del Estado tendrán que evitar el uso de expresiones como “todes”, “tod@s” o “todxs” en los proyectos que presenten al Gobierno o en las propias obras que produzcan.
El Gobierno brasileño prohibió ayer jueves el uso del llamado lenguaje inclusivo, que sustituye artículos masculinos o femeninos por las letras “x” o “e” o por el símbolo arroba (@) para evitar le mención del género, en proyectos culturales que aspiren a financiación con recursos públicos.
Los artistas, escritores o creadores que deseen financiación de sus iniciativas con recursos del Estado tendrán que evitar el uso de expresiones como “todes”, “tod@s” o “todxs” en los proyectos que presenten al Gobierno o en las propias obras que produzcan.
El veto fue impuesto en un decreto publicado ayer jueves en el Diario Oficial por la Secretaría de Cultura del Gobierno de Jair Bolsonaro, el militar de la reserva que llegó a ser cuestionado judicialmente antes de ser elegido jefe de Estado por manifestaciones machistas y homófobas.
Según el texto, en las iniciativas financiadas por la Ley de Incentivo a la Cultura queda “vetado el uso y/o utilización, directa o indirectamente, de lo que ha comenzado a ser conocido como lenguaje neutro (inclusivo)”.
El llamado lenguaje neutro en Brasil es una propuesta de diferentes organizaciones para adaptar la lengua y evitar que las personas no binarias, es decir las que no se identifican ni con el género masculino ni con el femenino, se sientan excluidas.
“Lo que se propone no es un lenguaje sino la simple destrucción de nuestra lengua”, alegó el secretario de Cultura de Brasil, el exactor Mario Frias, al justificar la decisión en un mensaje en su cuenta en Twitter.
El objetivo del decreto, agregó, “es garantizar el amplio disfrute de los bienes culturales e impedir que una imposición de arriba hacia abajo deje inviable o dificulte el acceso a la cultura”.
La medida del Gobierno nacional se suma a similares en 14 de los 27 estados del país, así como a un proyecto de ley en discusión en la Cámara de Diputados, que buscan impedir el uso del lenguaje inclusivo en las escuelas públicas.
“El uso de signos inintelegibles, cuyo objetivo es pura bandera ideológica, impide el disfrute de la cultura y sus productos debido a que interrumpe el proceso de comunicación”, agregó el jefe de Fomento e Incentivo a la Cultura de la Secretaría, André Porciuncula, autor del decreto.
Porciuncula alegó que el uso de sustitutos perjudica a grupos como los deficientes visuales y auditivos, ya que los programas de informática que usan para acceder a bienes culturales son incapaces de identificar el llamado lenguaje neutro.
La decisión brasileña va en contramano a iniciativas analizadas en Argentina para fomentar el uso del lenguaje inclusivo y hasta de una ley aprobada este mes por el Parlamento venezolano por la que se aprobó el uso y la promoción del lenguaje con “enfoque de género” a fin de garantizar la “igualdad”.
La ley venezolana “obliga a la utilización del lenguaje con enfoque de género en todas las comunicaciones orales y escritas emanadas de los poderes públicos, así como en todos los niveles y modalidades del sistema educativo”.