La Dragon encendió sus motores para comenzar del todo una viaje de seis horas hacia la Tierra.
Una cápsula Dragon de SpaceX con casi 2.000 kilos de material científico y suministros se separó este sábado desde la Estación Espacial Internacional (EEI) e inició su vuelta rumbo a las costas de Florida (EEUU), donde se espera caiga la tarde de hoy.
La nave se separó sobre las 11.05 hora hora del este de EE.UU. (15.05 GMT), desde el módulo Harmony de la EEI, que en ese momento navegaba a 420 kilómetros sobre el Océano Índico.
Poco después, la Dragon encendió sus motores para comenzar del todo una viaje de seis horas hacia la Tierra, tras permanecer prácticamente un mes atracado en el laboratorio orbital.
La Dragon caerá asistida con paracaídas en aguas del Golfo de México, frente a las costas de Tampa, donde miembros de fuerzas de seguridad y de la NASA procederán a extraer la carga para transportarla al Centro Espacial Kennedy, en Florida, asegurando una mínima exposición de las muestras científicas a la gravedad terrestre.
En su interior, la nave transporta 1.952 kilos de equipos y material científico, que incluyen muestras de experimentos realizados a bordo de la estación y en la microgravedad.
Entre los experimentos figuran uno que estudió la capacidad de cultivar plantas en el espacio para obtener alimentos frescos, de cara a futuras misiones de larga duración, así como otro enfocado en la reducción del riesgo para la salud cardiovascular de los astronautas.
La cápsula Dragon despegó el pasado 14 de marzo propulsada por un cohete Falcon 9, ambas fabricadas por la compañía privada SpaceX, desde el centro Kennedy y dos días después llegó a la EEI con 2.700 kilos de equipos, suministros y material científico.
La nave transportó incluso frutas y verduras frescas, así como queso congelado, que fue un pedido de la expedición a bordo del laboratorio orbital.
La que culmina hoy es la vigésimo séptima misión de abastecimiento que realiza la firma de Elon Musk para la NASA, virtud a un contrato con la agencia especial que también ha suscrito la compañía Boeing, que el próximo 21 de julio espera enviar su primera misión tripulada de prueba a la EEI a bordo de su nave Starliner.