La Fiscalía apela y comunidad china pide sean enérgicos con sanciones ejemplares para los responsables
La Fiscalía Superior Especializada en Delitos contra la Propiedad Intelectual y Seguridad Informática imputó este viernes, cargos por por el delito contra la propiedad industrial a un ciudadano de nacionalidad china, involucrado en la falsificación de monedas Martinellis, que fue capturado en la Operación Troquel, en la que le encontraron 1,669 pares de calzados con marcas falsificadas.
Sin embargo, la juez de garantías Irene Cedeño, rechazó la solicitud de la Fiscalía de detención preventiva para el imputado y en su lugar le impuso la medida cautelar de reporte periódico y el impedimento de salida del país.
La decisión fue apelada por la fiscal Keyla Pérez, al considerar que se mantienen elementos suficientes que fundamentan y acreditan la detención provisional, como los riesgos procesales.
El Ministerio Público indicó que esta investigación inició una vez que la Sección Tercera de Delitos contra el Patrimonio Económico de la Fiscalía Metropolitana capturó a dos ciudadanos de nacionalidad china en la Operación Troquel, realizada el 26 de noviembre por el delito de falsificación de monedas.
Explicó que al realizar una diligencia de allanamiento en la residencia del imputado, en Mirador del Lago, corregimiento de Las Cumbres, dieron con el hallazgo de los 1,669 pares de calzados con marcas falsificadas.
En los últimos días se han detectado, además de toda una producción de monedas falsas, arroz etiquetado con una marca nacional y ungüento falsificado sin registro sanitario, por lo que las asociaciones chinas en Panamá emitieron un comunicado donde hacen un llamado público a las autoridades aduaneras e igualmente al Ministerio Público, para que se investigue hasta dar con quienes se estén dedicando a estas prácticas de productos y monedas falsificadas y sean enérgicos en las sanciones que se les impongan.
Aseguran que brindarán todo el apoyo para que las investigaciones se realicen de manera eficaz.
Las asociaciones chinas consideran que la situación no solo está empañando el esfuerzo honesto y honrado que realizan a diario la mayoría de los comerciantes chinos en Panamá, sino que también, y más importante, ponen en riesgo la salud y el bienestar de toda la población, tanto nacionales como extranjeros, por lo que piden a las autoridades que a los que resulten responsables, “les apliquen las sanciones de manera ejemplar e implacable”.